¿Alguna vez escuchó usted hablar de los Millennials? Son famosos, aunque no conozcamos sus nombres y apellidos. Son la generación del Milenio porque nacieron entre 1980 y 1995. Por tanto, tienen hoy entre 21 y 36 años. Se calcula que en países como Estados Unidos existirían unos 80 millones de personas de esta generación también conocida como “Y”; 51 millones en Europa y en 2025 supondrán el 75 por ciento de la fuerza laboral del mundo. Por tanto, son importantes a la hora de hablar de consumo.

Hoy, todo tipo de empresas e instituciones tratan de identificar todo aquello que les permita acceder a la forma de pensar de esta generación, desde sus gustos, disgustos, motivaciones, preocupaciones y expectativas.

Entre dichas entidades está el sistema bancario que anda preocupado por el poco interés de estas personas por el ahorro y el escaso conocimiento por cómo manejar préstamos que no los terminen poniendo en problemas y, por ello, financian estudios en el mundo que les pueda permitir ver con qué tipo de servicios podrían capturar mayor cantidad de Millennials.

Uno de los descubrimientos de los diferentes estudios que se han venido haciendo es que existen ciertas tendencias comunes entre quienes son de esta generación. Entre las más importantes está que están conectados en por lo menos un 85 por ciento a la tecnología y su vida diaria se organiza alrededor de un teléfono inteligente.

Sin embargo, no es que la tecnología lo sea todo para ellos y ellas. Nacieron en una época signada por sistemas democráticos que no terminan de dar respuestas a las urgencias de la gente. Por ello, no creen mucho en los discursos que no están acompañados de acciones y no aceptan más que las empresas pretendan seguirles vendiendo por vender, sin incluir en su trabajo ética y valores vinculados al cuidado del medioambiente.

Valoran en extremo la experiencia cotidiana, más aquella vinculada a su periodo de vacaciones en el que aman viajar más que ahorrar dinero porque saben que tal vez mañana pase algo y ellos no estén más vivos en este mundo.

No andan por ahí llorando por lo que el mundo no les dio o lo hizo mal, sino todo lo contrario. Son alegres y sus fiestas son explosivas, divertidas. Sin embargo, como en todo, no faltará quien sea más tímido y prefiera una noche solo que acompañado por gente ruidosa que ni siquiera baila en pareja, sino en grupos.

¿A quién consideran su líder y qué esperan de él o ella? Algunas encuestas realizadas hasta en 26 países indican que por sobre todo importa que quien asuma el liderazgo posea un pensamiento estratégico; segundo, que sea fuente de inspiración; tercero, que tenga fuertes habilidades interpersonales; cuarto, una gran visión; quinto, pasión y entusiasmo y, sexto, que sepa tomar decisiones.

Y es una realidad que los jóvenes pertenecientes a esta generación están cambiando la forma en que trabajamos y las estrategias de atracción y retención de talento de las empresas.

Los Millennials se caracterizan por su conocimiento de la tecnología y las redes sociales; por ser multitask, soñadores y emprendedores. Así que si quieres conquistarlos en tu empresa, debes tener en mente lo que están buscando en un empleo. Toma nota: en el trabajo no es necesario estar sobre ellos. Si se los deja un poco, nos sorprenderán con los resultados. Esto implica, además, cambiar la imagen del jefe por el de un mentor o facilitador. Más que el dinero, lo que les motiva son el crecimiento y el desarrollo profesionales. A diferencia de gente de otras generaciones, a ellos y ellas les gusta compartir sus conocimientos y habilidades, además de aprender cosas nuevas.

Por lo explicado, estamos frente a una generación que efectivamente ve el mundo de manera distinta y, por ello, hay que conocerlos y conocerlas.