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  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 23:46

MARCO CUMPLIÓ SEIS AÑOS ANTES DEL ACCIDENTE.

Scaravelli muere pero salvará vidas

Scaravelli muere pero salvará vidas



En ocasiones la pasión por el motociclismo nos hace olvidar lo peligroso que puede ser, incluso en las situaciones en las que no hay riesgo. Por desgracia, la mala fortuna se ha cobrado la vida de un pequeño de Italia de tan solo seis años, Marco Scaravelli, cuando entrenaba junto a su padre para una carrera de minimotos en el Racing Park de Viadana (Mantua)

Los sueños de ser un gran piloto como tantos otros compatriotas transalpinos suyos se han visto truncados el pasado día 10 de julio. Ni siquiera estaba corriendo, habían acabado ya las prácticas cuando, mientras volvía al paddock empujado por su padre, arrancaron sin querer el motor de su minimoto.

Marco no pudo controlar la moto y acabó chocando contra una puerta, sufriendo un grave traumatismo craneoencefálico, además de otras lesiones en sus extremidades. Ni siquiera la completa equipación que llevaba evitó la magnitud del desastre.

Le trasladaron rápidamente a un hospital cercano donde los médicos le indujeron un coma. El sábado, su estado se agravó tanto que desafortunadamente falleció.

Pero entre todo el dolor por la pérdida de su hijo Marco, su padre y toda su familia han querido convertir unos momentos tan difíciles en una oportunidad para otras familias, ayudando a otros cinco niños. Los riñones, el hígado, el corazón y los pulmones de Marco serán donados para que otros pequeños puedan cumplir los sueños que a él se le han escapado.

“Marco siempre ha sido un niño feliz, alegre, y muy generoso, dispuesto a compartir un trozo de chocolate con mamá y papá, un juego con algún amigo. Hoy, sin embargo, se ha ido. Hoy, gracias a él, cinco familias podrán tener esperanzas. Hoy, gracias a mi hijo, Marco, cinco niños podrán empezar una nueva vida. Todo el mundo debe saber quién es Marco”, dijo su padre, Cristhian.