“Estoy mal, he renegado mucho y no quiero saber del asunto”, dijo el papá de uno de los cinco estudiantes señalados de haber cometido abuso sexual y ocasionar lesiones a sus compañeros, en un establecimiento educativo de Quillacollo.

El papá del presunto abusador escolar, quien enviudó recientemente, contó que padece desde hace más de siete años diabetes y su hijo involucrado en problemas con la ley es el último de cuatro.

El pasado viernes se cumplió la audiencia de medidas cautelares para los cinco adolescentes acusados de cometer abuso escolar.

Los acusados guardan detención domiciliaria por orden del juez, Porfirio Alba . La historia se remonta a principios del año escolar, se prolongó por cinco meses y salió a luz pública el pasado 16 de junio, por denuncia de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de Quillacollo.

MISMO ENTORNO Las presuntas víctimas y los supuestos abusadores viven en el mismo entorno urbano-rural, al norte de la ciudad de Quillacollo. A simple vista se puede apreciar la humildad de las viviendas que no cuentan con servicios básicos

Una pariente de otro de los adolescentes inmersos en el caso de “bullying” aseguró que sus padres les proveen lo necesario. También dijeron que los estudiantes son inocentes de las acusaciones de acoso escolar.

LO QUE SIGUE La Directora de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, Aracely Mamani explicó que los menores deberán permanecer en sus domicilios durante 45 días, tiempo en el que la Fiscalía debe concluir la investigación y acusar formalmente a los cinco estudiantes por lesiones y abuso sexual. Cada martes deben salir a firmar en la Fiscalía. Los padres, tutores y acusados recibirán apoyo sicológico en el Servicio Departamental de Gestión Social.

45 días

Los cinco estudiantes acusados de bullying cumplen detención domiciliaria por cuarenta y cinco días.