Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 16:15

CUATRO MAGISTRADOS VOTARON A FAVOR Y CUATRO EN CONTRA. CINCO MILLONES DE PERSONAS ESTÁN EN RIESGO DE SER DEPORTADAS. LA SOLUCIÓN A ESTE CONFLICTO PASA AL LEGISLATIVO.

Empate en el Tribunal Supremo deja a migrantes sin legalización

Empate en el Tribunal Supremo deja a migrantes sin legalización



Con tristeza y enojo la comunidad latina de Estados Unidos recibió ayer "devastada" la decisión del Tribunal Supremo que, tras un empate de sus jueces, deja en un limbo legal a casi cinco millones de inmigrantes indocumentados.

"Estamos devastados. Cinco millones de familias van a tener que sufrir lo que yo sufrí en la universidad cuando deportaron a mi familia. Hace ocho años que no puedo darle un abrazo a mi mamá", explicó a Efe Catalina Velasquez, directora de la organización "Young People For". Centenares de inmigrantes aguardaron ayer desde las cinco y media de la mañana el fallo frente al Tribunal Supremo, en Washington, con la esperanza de que aprobara el alivio migratorio, pero un empate entre los jueces resultó en la continuidad del bloqueo.

Velasquez se acogió en 2012 al programa de Acción Diferida (DACA), ordenado por Obama ese año y ampliado en noviembre de 2014, cuando el Mandatario decretó las acciones ejecutivas que fueron bloqueadas en los tribunales por la acción de 26 estados liderados por Texas, en su mayoría con gobernadores republicanos.

El fallo dividido de los cuatro jueces liberales y los cuatro conservadores del alto tribunal mantuvo en vigor el bloqueo dictado por la Corte Federal de Apelaciones del Quinto Circuito, con sede en Nueva Orleans, a la que había recurrido el Gobierno tras el bloqueo judicial de las medidas. "Es inhumano, de un nivel de obstrucción que no tiene sentido. No estamos pidiendo ningún servicio, solo permiso para trabajar", argumentó Velásquez. El presidente Obama declaró que el estancamiento judicial "nos aleja aún más del país que aspiramos ser".

La iniciativa de Obama incluía protecciones a padres de niños que están legalmente en el país y una ampliación del programa que ampara a gente que fue traída al país cuando eran menores de edad. Obama decidió aprobar el plan luego que los republicanos obtuvieron el control del Senado en las elecciones legislativas de 2014 y disminuyeron aún más las probabilidades ya remotas, de que el Poder Legislativo aprobara una reforma migratoria. Ahora la solución al conflicto vuelve al Congreso y de las medidas que tome el próximo mandatario que salga de las elecciones del 8 de noviembre, la demócrata Hillary Clinton o el republicano Donald Trump. "Los jueces tuvieron la oportunidad de estar del lado correcto de la historia, la justicia y la moral. Pero han sido cobardes y han decidido seguir jugando el juego político a los republicanos", valoró a Efe la organizadora de CASA Alma Couverthié.

Las organizaciones latinas explicaron que centrarán sus esfuerzos ahora en promover la naturalización de ciudadanos, que se registren para votar y que acudan a las urnas el 8 de noviembre.