La Ley 370 de Migración de Bolivia, del 8 de mayo de 2013, establece facilidades para aquellos bolivianos que han decidido retornar definitivamente al país.

Regresar a la nación con todas sus pertenencias personales y domésticas pasa por un trámite administrativo en las embajadas y consulados bolivianos del extranjero.

“Cuando retorné de Bérgamo (Italia) hace cinco años, no sabía que había que hacer un trámite en el consulado de allá. Tuve que vender todas mis cosas y venirme con el dinero”, manifestó Edgar Rojas, cochabambino que vivió diez años en el país del calcio.

El artículo 60 de la ley establece que el Ministerio de Relaciones Exteriores, a través de sus misiones diplomáticas y consulares, coadyuvarán el retorno de bolivianos y sus familias al país, cuando éstos lo soliciten organizadamente.

En el 61, explica que los bolivianos que deseen acogerse a los beneficios del retorno, podrán hacerlo por una sola y única vez, y deberán cumplir con los siguientes requisitos: primero, deben presentar una solicitud que manifieste su voluntad y decisión de retornar a Bolivia ante una representación consular; segundo, deben haber permanecido en el exterior no menos de dos años inmediatamente anteriores y verificables a la fecha de la presentación de la solicitud de retorno al país.