Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 13:26

EN SU PRIMERA JORNADA OFICIAL DE ACTIVIDADES EN EL PAÍS AZTECA, FRANCISCO EXIGIÓ A OBISPOS Y AUTORIDADES NO TOLERAR LAS LACRAS DEL NARCOTRÁFICO.

Papa reprende al alto clero y al poder político de México

Papa reprende al alto clero y al poder político de México
El papa Francisco instó ayer a la Iglesia católica y a las autoridades mexicanas atender los problemas que enfrenta México como el narcotráfico y sus consecuencias, y pidió a todos defender la identidad de las comunidades indígenas, en sus discursos durante la primera jornada de su visita a este país.

Tras su llegada a México procedente de Cuba, Francisco pronunció un inesperado discurso al clero mexicano reunido en la catedral de Ciudad de México: largo, fuerte y lleno de contenidos y llamadas de atención. En un texto, que en algunos momentos tuvo tonos de reprimenda a los obispos y religiosos mexicanos, les pidió que "no minusvaloren el desafío" que el narcotráfico representa para la "sociedad mexicana", incluida la Iglesia.

Con una fuerte metáfora, Francisco aseguró que el narcotráfico, por su proporción y por su extensión en el país, "es como una metástasis que devora". "La gravedad de la violencia que disgrega y sus trastornadas conexiones no nos consienten a nosotros, pastores de la Iglesia, refugiarnos en condenas genéricas", les insistió a los obispos. Por ello, les pidió "coraje profético y un serio y cualificado proyecto pastoral" para contribuir a crear una "delicada red humana, sin la cual todos seríamos desde el inicio derrotados por tal insidiosa amenaza". Y les dio la receta para ello: "Comenzando por las familias; acercándonos y abrazando la periferia humana y existencial de los territorios desolados de nuestras ciudades; involucrando las comunidades parroquiales, las escuelas, las instituciones comunitarias, la comunidades políticas, las estructuras de seguridad". También recordó que "los indígenas de México aún esperan que se les reconozcan efectivamente la riqueza de su contribución".

Francisco ya había hablado de estos temas en el discurso ante el presidente Enrique Peña Nieto y las autoridades mexicanas, cuando les recordó que "la búsqueda de los privilegios conduce a la corrupción, el narcotráfico y la violencia".