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  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
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ARGENTINA, PARAGUAY, URUGUAY Y BRASIL OFRECEN CONCESIONES PORTUARIAS Y ZONAS FRANCAS QUE FACILITAN EL ACCESO COMERCIAL A IMPORTANTES MERCADOS

Bolivia tiene salida al Atlántico por 4 países, pero no la aprovecha

Bolivia tiene salida al Atlántico por 4 países, pero no la aprovecha



Bolivia tiene acuerdos binacionales con Argentina, Paraguay, Uruguay y Brasil, que les facilitan concesiones portuarias y zonas francas para un acceso al mar por el océano Atlántico que le permita exportar e importar, pero aún no logra consolidar el uso de esas licencias.

El viceministro de Comercio Exterior, Clarems Endara Vera, en entrevista con OPINIÓN, explicó que, con la aprobación de Congreso brasileño en junio para concesiones de zona franca en Paranaguá, se completa el circuito del Mercado Común del Sur (Mercosur) que facilita a Bolivia para virar nuevas opciones de salida al mar por el Atlántico.

Sin embargo, Endara admitió que este circuito no se está aprovechando adecuadamente por una serie de situaciones que tienen que ver con tiempo, distancias y facilidades que deben ser coordinadas entre exportadores y Gobierno.

“La ratificación del convenio en el Congreso de Brasil refleja la voluntad del Gobierno brasileño hacia el país de cumplir compromisos y otorgar facilidades para un acceso al océano Atlántico”, aseveró.

CONCESIONES Dijo que Bolivia tiene actualmente concesiones portuarias y zonas francas en la hidrovía Paraguay–Paraná, en la zona del puerto Rosario, en Argentina; en el puerto de Villetas, cedido por el Paraguay; además de los puertos de Montevideo y Nueva Palmira, otorgados por Uruguay, país con el que también se firmó un memorándum conjunto para la construcción de una infraestructura portuaria en su puerto de Aguas Profundas.

“Aguas Profundas de Uruguay es una propuesta que está en ejecución y construcción, donde Bolivia tiene que definir las condiciones sobre las cuales quiere participar”, explicó Endara.

Con Brasil, con el que el proceso de concesión termina con la aprobación en su Congreso, Bolivia accede a un depósito franco en el puerto de Paranaguá, lo que también acerca los lazos con los países del Mercosur.

Manifestó que todos estos acuerdos de concesiones portuarias y zonas francas son una abierta posibilidad y una alternativa para que Bolivia “materialice” su acceso al Atlántico.

DECISIÓN POLÍTICA Para el uso de las zonas francas portuarias que ofrecen los países del Mercosur, a decir de Endara, hace falta una decisión política conjunta con los dueños de la carga, que son los empresarios privados, de manera que se les pueda dar una “verdadera utilidad”.

“Un puerto o un depósito franco no tiene utilidad si no administra carga; es decir la forma de recuperar el capital de un depósito, darle utilidad, tener empleados, la compra de maquinaria, depende de la cantidad de carga que se va a manejar”, agregó.

Dijo que, por el momento y con gran prioridad, se debe manejar la carga privada.

Para la exportación de hierro de El Mutún, estos puertos se constituyen en un potencial para que las grandes cargas puedan salir por la hidrovía, requiriendo tan solo de lugares específicos de almacenaje, que pueden ser los depósitos francos de Paranaguá.

PUERTOS CHILENOS A decir del Viceministro, los empresarios privados prefieren los puertos chilenos, con prioridad Arica, por un tema fundamentalmente de distancia, lo que hace poco atractiva la exportación o importación por el Atlántico.

Considera que este panorama desincentiva a los privados a hacer uso de los puertos y zonas francas que se tienen con los países del Mercosur.

“Actualmente, los puertos chilenos son los más utilizados para el comercio exterior por la facilidad de cercanía, dado que desde Santa Cruz, Cochabamba, Potosí, La Paz y Oruro a los puertos de Arica se necesita entre 10 y 28 horas de viaje”, aseveró.

En cambio, precisó que, por el lado de la hidrovía, para la exportación de cualquier producto por un puerto del Atlántico se necesita entre 30 a 35 días.

En consecuencia resumió que el tema de tiempo, distancia, vías de comunicación y costos definen la predilección por los puertos de Chile para hacer el comercio exterior.

Según el viceministro Endara, es imperioso trabajar en los puertos y depósitos francos para demostrar las posibilidades, capacidades y beneficios a fin de que los privados puedan explotar estas concesiones.

Apuntes.

Condicionantes

La Cancillería admite que el volumen de carga, los costos, el tiempo y las vías de transporte condicionan nuevas alternativas portuarias que ofrecen países del Mercosur para comercio exterior boliviano por el océano Atlántico.

Paranaguá

El Congreso brasileño ratifica después de 25 años un acuerdo que le otorga a Bolivia tener acceso a un "depósito franco" en el puerto brasileño de Paranaguá, considerado uno de las más grandes terminales graneleros de América Latina y ubicado en el sureño estado de Paraná. A través de ese depósito, Bolivia podrá realizar operaciones de importación y exportación.

Hidrovía

Uruguay pondrá en marcha “acciones urgentes” para facilitar el acceso de Bolivia al océano Atlántico mediante sus puertos y la hidrovía Paraguay-Paraná, con la finalidad de atenuar los efectos de su encierro geográfico.

La alternativa peruana de Ilo

Eonsultado sobre la posibilidad de potenciar los puertos de Ilo en Perú para dejar paulatinamente los chilenos, el viceministro de Comercio Exterior, Clarems Endara, dijo que aún no se puede trabajar con total libertad y decisión política porque aún está pendiente la ratificación del Congreso de ese país.

Prevé que, por el volumen exportador creciente de los últimos años, los puertos de Arica en poco tiempo quedarán rebasados, por lo que fija como desafío tener una alternativa real para el comercio exterior boliviano.

Manifestó que los ancladeros del Pacífico (Chile y Perú) son los puertos naturales que tiene Bolivia para ejecutar su comercio exterior de exportación e importación. El mejoramiento de las condiciones de almacenamiento y operatividad de los puertos determina la decisión del empresario de trabajar con determinado puerto por Chile o Perú, en el Pacífico, al igual que en el Atlántico.

Paranaguá ofrece operatividad libre y las exportaciones por la hidrovía bordean 3 por ciento

La concesión de puertos o la zona franca. Partiendo de esas opciones, Bolivia tiene que decidir qué participación quiere tener en esos ofrecimientos de Brasil en puertos de Paranaguá para lograr altos beneficios de operatividad libre. Existe la opción de ser socios dentro la construcción de la infraestructura y así tener la posibilidad de mejor administración. O también de proponer solo el empleo o administración de máquinas.

El viceministro Clarems Endara sostiene que la concreción de este ofrecimiento a Bolivia por parte de Brasil permite un acercamiento con los países del Mercosur.

“Si bien Paranaguá no es puerto soberano, Bolivia podrá utilizar este depósito franco en condiciones ventajosas. La administración, expedición y almacenaje de la mercadería boliviana estará dentro de un régimen especial. Es decir, si se decidiera realizar el almacenaje, consolidación de carga en Paranaguá, se debe definir con las autoridades brasileñas un espacio físico para la administración del mismo”, aseveró.

Comentó que está pendiente una reunión bilateral prevista para este mes en la que se definirían los alcances de esta concesión portuaria.

La comisión boliviana estará compuesta por la Cancillería, el Ministerio de Hacienda y la Administradora de Puertos.

En la citada reunión se prevé delimitar el sector y la utilidad del depósito; el mismo puede tener distintos usos como: minerales, granos, conteiner, productos almacenados al aire libre. En síntesis, se puede trabajar con un depósito que sea multipropósito.

“Lo que debemos definir con las autoridades brasileñas es el perímetro que será cedido y empezar a reglamentar la condiciones bajo las cuales nosotros vamos a utilizar este depósito franco”, dijo.

En criterio de Endara, el puerto de Paranaguá está atravesando por una etapa de rediseño y de reestructuración interna, por lo que Bolivia debe definir cómo quiere utilizar este depósito y las condiciones que deben ser adaptadas al ámbito físico.

Posteriormente corresponderá a la Administradora Portuaria Boliviana (ASPB) hacer una inspección in situ del lugar, realizar un estudio de carga y utilidad de puerto para definir si es pertinente la inversión y si tendría una administración conjunta con las autoridades del vecino país.

HIDROVÍA Bolivia no aprovecha las ventajas que ofrece la hidrovía Paraná- Paraguay, pues en 2014 pasaron exportaciones por esa vía de un 2.7 por ciento del total nacional, según datos del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).

Bolivia accede desde esta hidrovía de forma directa a puertos argentinos y uruguayos, ubicados en el océano Atlántico; pero la carga se limita a productos oleaginosos (derivados de la soya). Por ejemplo, 59 por ciento de lo exportado por esta ruta en 2014 fueron tortas de soya por un volumen de 668 mil toneladas y un valor de 280 millones de dólares.

El segundo producto más exportado es el aceite de soya, con un volumen de 124 mil toneladas y un valor de 109 millones de dólares; le siguen los granos de soya, con una participación del 17 por ciento en valor, señala el IBCE.

Mercosur abre vías para llegar a mercados de Asia y Europa

La fluidez de carga, el tipo de depósito en zona franca que se quiere administrar y las concesiones portuarias que otorgan los países del Mercosur, ponen a Bolivia con un pie en el océano Atlántico para llegar directamente al mercado asiático y europeo.

El viceministro de Comercio Exterior, Clarems Endara, dijo que estas alternativas que ofrecen los países del Mercosur deben ser aprovechadas por Bolivia, previa alianza estratégica con los privados, que son los directos interesados para la exportación e importación.

No obstante, admitió que, tomando en cuenta que todos los productos que ingresan al país llegan vía puertos del Pacífico, la importación y exportación por la hidrovía no ha sido “muy efectiva”.

La propuesta boliviana del corredor interoceánico central, que aún falta por avanzar en su diseño y ejecución, perfila hacer la conexión férrea desde las zonas productivas hacia los puertos de Santos, Paranaguá del Brasil y puertos Busch, Suárez y todo el eje troncal de Bolivia, lo que favorecería en gran medida salir por puertos del Atlántico.

Admitió que una forma de abaratar costos para exportar por Brasil es la adhesión a las líneas férreas del Brasil para salir a puertos de Santos y Paranaguá.

Según Endara, el aprovechamiento de almacenamientos francos tendría que darse a partir de una coordinación y ejecución conjunta en la logística del transporte.

“La utilización de estos depósitos intermedios abarataría la exportación del producto; la carga en estos depósitos posibilita la utilidad específica, para lo cual, se tiene que hacer estudios de logística de transporte”, agregó.

Endara también dijo que la zona franca en Rosario (Argentina) reúne mejores condiciones, por lo que, a la fecha, la Cancillería realiza estudios para reactivar su funcionamiento.