El bebé pasea en brazos de su madre temporal, por decirlo así. Es su hora de juego y comparte el área de entretenimiento con los demás niños del hogar.

Ángel, como lo llaman, se divierte con los otros pequeños, que están en sus andadores, cochecitos y demás juguetes. Permanecen bajo la mirada vigilante de las mamis.

El menor de seis meses permanece en el centro de acogida, desde la madrugada del domingo pasado, cuando sufrió una feroz golpiza propinada por su madre Claudia Paniagua, quien enfrenta una acusación penal por intento de infanticidio.

El pequeño ocupa una de las 40 cunas de madera de la sala decorada con múltiples motivos infantiles.

LAS HUELLAS En el rostro de Ángel aún están visibles las huellas de la golpiza que recibió, en la mejilla y la frente se ven los moretones y en su cuerpo hay cicatrices de pellizcos.

El personal del centro todavía conserva las dos prendas con las que llegó el bebé, una polera y un buzo tipo polar, nada más. “No llevaba ni chompa ni medias a esa hora de la madrugada en plena calle”, lamenta la directora del centro de acogida Emma Rojas.

Guadalupe Córdova, que es la responsable del menor, lo bañó temprano y lo vistió con un conjunto tipo marinero. Su atuendo de miércoles es un buzo azul de algodón, una polera a rayas, medias con dibujos animados y un babero.

MUCHO CARIÑO Se lo ve saludable y vivaz, pero a momentos suspira tan profundamente que su pequeño cuerpecito se estremece completamente.

Es que necesita mucho afecto, abrazos y caricias porque ha sufrido maltrato, explica la directora del albergue.

Dice que en el menor se reconocen los síntomas de un proceso de desintoxicación, lo que hace deducir que el niño estaba expuesto a la clefa, como su madre.

Ángel disfruta de las atenciones y mimos. Tiene la suficiente fuerza para sujetar con energía los dedos de quienes lo acarician. De tiempo en tiempo responde a los estímulos y regala sonrisas. Solo muestra sus encías porque aún no le “reventó” ningún diente.

ALIMENTACIÓN Pese a no tener dentadura, el bebé recibía comida para adultos, dice la responsable del hogar. Ahora le dan una leche especial por lo menos tres veces al día. También de dan papillas dulces y saladas a media mañana y a media tarde. Las dulces son las de su preferencia.

Guadalupe cuenta que a veces rechaza la mamadera y es alimentado, eso la obliga a darle la leche con cucharilla.

Si bien el peso y la talla del niño corresponden a su edad, el personal de salud del centro asegura que sufre de desnutrición.

La enfermera Mercedes Veizaga asegura que padece de anemia.

Para descartar cualquier otro mal, los profesionales le realizaron análisis de laboratorio para detectar Chagas y el Virus de la Inmunodeficiencia Humana VIH.

Es cerca del mediodía y es hora de abandonar el centro porque el niño se ha dormido. Tiene un sueño a ratos fatigado.

Será un juez de la Niñez y Adolescencia quien determine la custodia legal del menor. Por ahora, Ángel es cuidado y querido en el hogar.

Serán revisados antecedentes de acusada de intento de infanticidio

La Defensoría de la Niñez y de la Adolescencia solicitará una evaluación psicosocial de Claudia Paniagua, acusada por el delito de tentativa de infanticidio.

El abogado de la Defensoría Johnny Ariel Olivera Flores informó ayer que se indagarán todos los antecedentes de la madre para reforzar la acusación y lograr una sentencia condenatoria.

En caso de que el juez declare la culpabilidad de la madre ya no podrá reclamar la tenencia de su niño, quien se encuentra acogido temporalmente en un hogar, señaló.

La mujer de 27 años golpeó ferozmente a su hijo de seis meses en plena vía pública, la madrugada del domingo pasado. Las declaraciones de los testigos permitieron que el caso pueda judicializarse por la vía penal.

Olivera cuestionó las investigaciones iniciales realizadas por la Policía y el informe del médico forense, porque no reflejaron la gravedad de los hechos y hubiese puesto en riesgo el proceso.

Dijo que Paniagua tiene otro hijo de tres años que se encuentra en un centro de acogida y se investigarán las razones por las que el menor fue derivado ahí.

El profesional adelantó que la Defensoría también realizará el proceso de la extinción de pérdida de maternidad ante un Juzgado de la Niñez y Adolescencia.

Posteriormente, solicitará la situación de adoptabilidad del menor.