“Yo no podría mentir. No se ha hecho nada porque siguen ahí afuera”, dijo el alcalde de Cochabamba, Armando Vargas, en relación a la falta de políticas públicas y programas para resolver la situación de los inhaladores de clefa que se encuentran en situación de calle.

Señaló que hace un mes se enteró que es presidente del Consejo Municipal de Seguridad Ciudadana. En la primera reunión a la que asistió exigió soluciones concretas para esa problemática (de los inhaladores de clefa) y no solo discursos.

La autoridad informó que se harán esfuerzos y se destinará un presupuesto necesario para implementar albergues y así encarar procesos de rehabilitación y reinserción social de este grupo.

Demandó el apoyo de la Gobernación con la dotación de infraestructura.

GOBERNACIÓN El director del Servicio de Gestión Social (Sedeges), Freddy San Millán, reconoció que es lento el proceso de rehabilitación y reinserción de las personas que inhalan clefa.

Explicó que el abordaje a esa población es integral, es decir que se inicia con la aproximación a los dependientes hasta su completa rehabilitación.

Mencionó que de los 900 drogodependientes identificados en Cochabamba se logró trabajar con cerca de 30. Diez están listos para reinsertarse a la sociedad.

San Millán demandó la aprobación de una normativa, con grado de ley municipal, para los niños y adolescentes que consuman drogas en las vías públicas. La sanción sería la asistencia obligatoria a centros de rehabilitación.

POBLACIÓN Los ciudadanos expresaron su molestía, indignación y preocupación porque las autoridades municipales y departamentales no dan soluciones concretas al problema de los drogodependientes. Además, aseguraron que existe poco control policial para esta población que cada vez crece más.