El subteniente Richard Emerson Gutiérrez Cuéllar salió escoltado por agentes de la Policía, anoche, del Juzgado de Sacaba, hasta su casa en la zona de Villa Graciela (Pacata).

El juez Pablo Antezana determinó detención domiciliaria, arraigo y una fianza de 20 mil bolivianos para el oficial acusado de incumplimiento de deberes y beneficios en razón de cargo, en relación a la matanza de El Abra y las denuncias de extorsión, tortura y vejámenes que salieron a la luz luego de la tragedia en la que cinco personas fueron asesinadas y 11 resultaron heridas el 14 de septiembre.

La fiscal Jhossy Arauco denunció que Gutiérrez, conforme a declaraciones de varios privados de libertad, consumía bebidas alcohólicas en celdas con el delegado asesinado Edgar Ariel Tancara.

El abogado defensor, Julio Miguel Torrico, reiteró varias veces que el día de la matanza su defendido no estaba en el penal porque luego de una vacación, del 16 de agosto al 12 de septiembre, se presentó y le dijeron que retorne directamente el 15 de septiembre.

El juez desestimó la petición del Ministerio Público de detención preventiva y ordenó medidas sustitutivas, detención domiciliaria bajo vigilancia, prohibición de salir del país, ordenando el arraigo, prohibición de comunicarse con posibles testigos del hecho y la fianza.

El acusado demostró domicilio, familia constituida y que no existe riesgo de fuga.

El abogado defensor resaltó que su cliente se defenderá “en libertad”.

“Ahora, lo que vamos a hacer es asumir la defensa plena en el proceso para demostrar la total inocencia de mi cliente”, afirmó.

La fiscal manifestó que se presentaron las pruebas con las que contaba, que continuará la investigación y que hará una valoración para ver si apela la decisión del juez.