Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 21:24

Prevenir efectos de fenómenos climáticos

Prevenir efectos de fenómenos climáticos
En estas últimas semanas nuestro país está experimentando algo que en realidad ya no resulta nuevo: Miles de familias, ganado, cultivos y viviendas están siendo afectadas por los fenómenos climáticos adversos de diferente magnitud. Recordemos algunos datos recientes: en todo el país las familias afectadas ascienden a 16.800 (mientras se escriben estas líneas ya alcanzan a 21 familias y se ha declarado emergencia nacional), existen 2.800 hectáreas de cultivo dañadas y el número de viviendas anegadas alcanzan a las 450; los departamentos más afectados son Cochabamba, el norte de La Paz y el sur de Beni, los cuales atraviesan por situaciones difíciles por las intensas lluvias, los desbordes de ríos, inundaciones, derrumbes y granizadas. Los daños también incluyen a la infraestructura como caminos, puentes, viviendas, unidades productivas, unidades educativas y otras.

Esa es la historia que año tras año escuchamos y parece que aún no aprendemos y no queremos captar el mensaje que nos está dando la naturaleza. Si esta situación, agravada por el cambio climático, ya es parte de nuestra realidad, cada municipio y gobernación debería contar mínimamente con sistemas de alerta temprana (SAT), planes de contingencia y planes de adaptación al cambio climático; esos planes ayudarían a prevenir, mitigar daños y fortalecer la capacidad de resiliencia de familias rurales y urbanas frente a esos fenómenos.

Para ello es necesario invertir en estudios y en la aplicación de tecnologías que ayuden en la tarea de prevención y adaptación al cambio climático. Como ejemplo se puede señalar lo que hacen algunos municipios como Vitichi (Potosí), donde se han realizado estudios para establecer estaciones meteorológicas, de modo que la información generada ayude a los productores a enterarse y prepararse de manera oportuna ante amenazas evidentes. O bien, el uso de la biotecnología para desarrollar plantas (cultivos) resistentes a la sequía, helada, anegamiento, niveles de productividad, variedades precoces o tardías. Todo ello considerando el conocimiento local sobre el manejo del clima, la producción y el respeto a la Pachamama.

Por otro lado, si bien nuestro país ha dado un paso importante con la implementación de Seguro Agrario que llega a productores de municipios con extrema pobreza, es importante también desarrollar otros sistemas de seguros agropecuarios para la diversidad de productos y ecorregiones con los que contamos.

En ese sentido, es necesario enfocar acciones para la prevención y adaptación a estos fenómenos climáticos adversos, mismas que deben ser respaldadas con políticas e inversiones urgentes, de lo contrario, como dice un experto “después será mucho más caro” (Christopher Field del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático).