Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 11:15

EL MINISTERIO DE EDUCACIÓN LLEVÓ A CABO UNA INVESTIGACIÓN NACIONAL EN UNIDADES EDUCATIVAS PRIVADAS Y FISCALES, PARA LA ELABORACIÓN DE CAMPAÑAS Y DE UNA NORMATIVA

El machismo se reproduce con el bullying

El machismo se reproduce con el bullying



El machismo en las familias se reproduce en el bullying o violencia escolar entre pares en las unidades educativas de Bolivia, siendo las estudiantes las más afectadas, según un estudio del Ministerio de Educación.

Los resultados del estudio, efectuado en diferentes unidades educativas bolivianas, evidenciaron de forma preocupante que las mujeres son las que más agresiones sufren por parte de los varones.

La responsable de la Unidad de Género del Ministerio de Educación, Roxana Zaconeta, explicó que la violencia en las escuelas es una reproducción de lo que viven los niños y adolescentes en sus hogares.

“La sociedad machista parte en la edad escolar con el bullying. Los niños y niñas violentos vienen de hogares altamente violentos, es un círculo vicioso que se reproduce cuando se convierten en personas mayores, por eso es fundamental asumir medidas preventivas a tiempo”, afirmó.

El diagnóstico realizado en colegios fiscales y privados del país determinó que las agresiones psicológicas más frecuentes son por la condición de ser “mujer”, luego por ser gordo o flaco, por el color de piel, por el apodo, por la estatura y por origen indígena, entre otros.

“Evidenciamos que, si hay violencia en los hogares, los hijos la reproducen en las escuelas. Cuando se preguntó a las estudiantes por qué sufren violencia, las respuesta fue por la condición de mujer”, aseveró la experta.

El estudio fue realizado por el Ministerio de Educación en noviembre de 2012, con la participación de 125.200 alumnos de 1.172 unidades educativas fiscales y privadas del país, tanto del área rural como urbana, para identificar la situación de violencia en el ámbito educativo.

La encuesta fue aplicada al alumnado, maestros, padres de familia, directores y administrativos.

El representante de Visión Mundial Juan Carlos Gonzales consideró que las campañas masivas en las escuelas para construir conciencia en los menores son una de las principales alternativas para bajar los niveles de violencia entre pares en las unidades educativas.

Dijo que han aparecido a la par de los avances de la tecnología otras formas de agresiones como es el “ciberacoso”, a través del internet y los celulares.

Además, dijo que está creciendo alarmantemente el cohecho como otra forma de violencia escolar, cuando algunos niños les obligan a sus pares a hacer cosas que no quieren, lo cual tiene que ver fundamentalmente que ver con posiciones de poder.

Gonzales consideró que los niños y niñas que tienen baja autoestima son los más propensos a sufrir este tipo de violencia escolar.

El diagnóstico realizado en colegios fiscales y privados señala que cerca al 90 por ciento de los encuestados, entre estudiantes, maestros, padres y administrativos, asegura que la violencia psicológica, física y sexual está presente en las unidades educativas, por lo tanto existe bullying en varias formas.

“El diagnóstico demuestra que la violencia se reproduce, pues los niños violentos responden a hogares donde hay maltrato. En general, el 88 por ciento de personas encuestadas identificó tres tipos de violencia en los colegios: la psicológica, física y sexual”, precisó la responsable de la Unidad de Género.

Por su parte el psicólogo Adolfo Fabiani manifestó que el problema es más grande de lo que aparenta, pero es verdaderamente difícil encararlo, no sólo porque las víctimas no siempre se atreven a denunciarlo, sino sobre todo porque no es fácil definir sus contornos.

Los varones son los más responsables de agresiones

El diagnóstico realizado en colegios fiscales y privados del país determinó que los más responsables del denominado bullying son los varones, en un 24 por ciento .

“Una vez más se ratifica que el machismo está incluso en la violencia en las escuelas, donde este sistema patriarcal está presente”, explicó la experta del Ministerio de Educación, Roxana Zaconeta.

Los resultados del estudio arrojaron otro elemento preocupante, pues los encuestados ubicaron en segundo lugar de agresión a los profesores varones, con un 12.7 por ciento , lo que ha llamado la atención de las autoridades del Ministerio de Educación, que impulsa en la Asamblea Legislativa una ley para enfrentar la violencia en las escuelas.

Las estudiantes mujeres tampoco están exentas de ser agresoras, pues los consultados las ubican en tercer lugar con 11 por ciento ; luego vienen las maestras mujeres con 10.7 por ciento .

El estudio determinó que los agresores también son los regentes y porteros con 9 por ciento , directores con 8.2 por ciento y los padres de familia con 4 por ciento , entre otros.

Los centros escolares son lugares propicios para esta forma de violencia que suele pasar desapercibida por parte del profesorado, porque acontece en lugares preferentemente alejados de la supervisión directa del adulto, es decir, en patios, servicios, vestuarios, comedores, a la salida de la escuela, en el transporte escolar, etc. El acoso puede continuar en presencia del profesor, en el aula de forma disimulada.

“Basta una mirada o un escrito para que el acosador o acosadora intimide al acosado o acosada”, dijo Zaconeta.

El psicólogo Adolfo Fabiani consideró que el bullying es un problema complejo, en la medida en que es la manifestación de un problema estructural que excede los límites de la escuela, además que se da en menores, grupo social al que generalmente la sociedad no atribuye maldad.

“El bullying o acoso escolar es una dolorosa realidad. Hay que enfrentarlo con la prevención y con apoyo integral de los padres, profesores e instituciones, tomando en cuenta que no se puede castigar a los menores, ni son imputables de acuerdo a las leyes”, agregó.

Dijo que hay que trabajar para encontrar mecanismos efectivos que posibiliten la erradicación de la violencia en las escuelas y colegios.

Señaló que es imposible pensar en sanciones coercitivas para los niños y niñas e incluso hasta para adolescentes de 12 años, pues así lo estipula la Constitución Política del Estado.

La violencia psicológica es la más frecuente

La violencia psicológica es la más recurrente del bullying en las escuelas de Bolivia, seguida de la física y por último la sexual, señala un informe proporcionado por el Ministerio de Educación.

“El diagnóstico demuestra que la violencia se reproduce, pues los niños violentos responden a hogares donde hay maltrato. En general, el 88 por ciento de personas encuestadas identificó tres tipos de violencia en los colegios: la psicológica, física y sexual”, precisó la responsable de la Unidad de Género, Roxana Zaconeta.

Según los datos, en la categoría sobre las agresiones más recurrentes los resultados de la encuesta señalan que en un 45 por ciento están los insultos, apodos y bromas groseras, que constituyen la violencia psicológica.

En segundo lugar se ubican las agresiones físicas con un 28 por ciento (como las peleas y agresiones del más fuerte al más débil, o de grupo a un individuo).

En tercer lugar, un 20 por ciento de los consultados, dijo no haber visto violencia o bullying.

Finalmente, con un 6.5 por ciento se ubica la violencia sexual, expresada en acoso sexual y miradas insinuantes.

El análisis realizado en colegios fiscales y privados del país también evidenció que después de la condición de mujer, otros motivos son la condición física, el color de piel, la estatura, el apellido y la condición indígena.

El ministerio ha elaborado un diagnóstico con datos preocupantes, que ahora son parte de la campaña que se inició el jueves con el aliado estratégico Visión Mundial, para enfrentar la violencia en las escuelas.

“Este estudio ha tenido la capacidad de poder reflejar datos respecto a los tipos de violencia que se da en las escuelas”, agregó Zaconeta.

Se aplicarán desde medidas preventivas, con cursos de orientación a niños y profesores, hasta medidas coercitivas en el caso de los imputables, es decir mayores.

El experto de Visión Mundial Juan Carlos Gonzales dijo que lo fundamental es el trabajo de prevención a través de campañas en las escuelas, para la construcción de conciencia ciudadana pacífica.

“Tenemos que ser capaces de generar planes educativos de convivencia pacífica, pero deben ser integrales. Deben participar activamente alumnos, profesores y padres de familia”, afirmó el experto.

Procesos a maestros por permitir violencia en las escuelas

Los maestros y directores de unidades educativas que no frenen casos de bullying en sus colegios pueden ser acusados de negligencia por los padres de familia. Las sanciones van desde descuentos hasta despidos, según reglamentos vigentes que también están siendo avalados en el proyecto de Ley de Lucha Contra la Violencia Escolar.

“Los responsables de que el bullying no ocurra son los directores y profesores de los colegios. Si es que un padre no recibe respuestas, debe acudir a instancias superiores aduciendo negligencia”, expresó el jefe de la Unidad de Transparencia del Ministerio de Educación, Carlos Echazú.

Las sanciones, dependerán de la falta, van desde descuentos de 1 a 5 días de haber hasta destitución del cargo para fiscales, y el descuento del 10 por ciento a ingresos mensuales para colegios privados.

En la Cámara de Diputados está la propuesta de Ley de Lucha Contra la Violencia Escolar construida durante casi dos años.

Tiene varias partes que plantean medidas coercitivas y que responden a un decreto aprobado en agosto de 2012.

ACOSO SEXUAL Además, según la responsable de la Unidad de Género, Roxana Zaconeta, las maestras o maestros que cometan violencia sexual van a ser expulsados del magisterio y deberán someterse a los procesos penales, según el delito.

El Ministerio de Educación informó que entre enero de 2012 y septiembre de este año, en el país se registraron 67 casos de agresión sexual de maestros a estudiantes.

Por lo anterior, una veintena de docentes fueron suspendidos con una imputación formal.

Una vez que procede la imputación formal, el Ministerio de Educación, a través de sus direcciones, retira a esos docentes de la planilla de salarios.

Zaconeta recordó que antes un maestro que era denunciado tenía que ser procesado administrativamente, y luego era retirado de las planillas y posteriormente se le suspendía.