Hobbit ofrece pocas novedades y es la saga del Señor de los anillos
13 de diciembre de 2012 (21:20 h.)
"The Hobbit: An unexpected journey" es una continuación estética de la trilogía del Señor de los Anillos y un ejemplo de cómo explotar hasta el final el boom de las historias de Tolkien con un producto tan sólido y correcto como poco novedoso.
Una cifra que animó fácilmente a los estudios a poner en marcha otra adaptación de la que finalmente se encargó Jackson, que ha realizado un filme muy similar en estética y estilo al Señor de los anillos, estupendamente rodado y muy fiel a la historia del libro.
Pero que no aporta nada nuevo y en el que se echa en falta el tirón tanto de Elijah Wood como de Viggo Mortensen, pese a que Jackson se ha rodeado de algunos de los nombres más destacados de la trilogía anterior, como Ian McKellen (Gandalf), Cate Blanchett (Galadriel, princesa de los Elfos) o Christopher Lee (Saruman)
Martin Freeman, como Bilbo Baggins, es la incorporación más destacada de un reparto coral en el que sólo McKellen brilla a la altura deseada.
Y aunque la historia es totalmente fiel a lo escrito por Tolkien, su traslación a la gran pantalla resulta un poco menos trepidante que la novela.