El presidente Evo Morales posesionó este jueves al coronel Alberto Jorge Aracena Martínez, quien estuvo en la represión a la marcha indígena en Chaparina, como nuevo comandante de la Policía Boliviana, en reemplazo del coronel Víctor Santos Maldonado.
“La Policía Boliviana, como institución fundamental del Estado, debe vivir una transformación de descolonización, no solamente la parte estructural sino también la descolonización del pensamiento (de los policías) hacia el cambio de nueva actitud al servicio de la sociedad”, dijo el nuevo jefe policial.
Aracena se desempeñó como director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) en la sede de gobierno, fue Comandante de la Policía Departamental de La Paz y Director Nacional de Inteligencia.
El 21 de mayo, la posesión de Maldonado causó malestar y críticas dentro y fuera de la Policía, porque el exdirector Nacional de Inteligencia estaba en la lista de denunciados en la represión a los indígenas en Chaparina, sucedido el 25 de septiembre de 2011.
Y el exdirector nacional de la FELCC, coronel Jorge Toro, señaló que prefería dejar el cargo, antes de ponerse al mando de un “agente civil”. De la misma forma, un sector pasivo de la policía también expresaron su rechazo a la designación de Maldonado porque consideraron como un atropello a la institucionalidad.