Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 29 de marzo de 2024
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EL PRIMER SEMESTRE. LA DEFENSORÍA DE LA NIÑEZ Y ADOLESCENCIA RECIBIÓ 227 DENUNCIAS. LA FAMILIA SE DESINTEGRÓ, LOS PADRES PELEAN Y LOS HIJOS PADECEN

Migrantes pierden amor de sus hijos y la custodia

Migrantes pierden amor de sus hijos y la custodia

Muchas veces, son los niños quienes ya no quieren regresar con sus papás.



MARTÍN NUMBELA



Los conflictos de guarda han llegado al 10 por ciento de las denuncias recibidas en la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de Cochabamba debido al regreso de los padres migrantes que desean recuperar la custodia de sus hijos.

La información la ofreció la responsable de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de Cochabamba, Mabel Montaño. La autoridad explicó que en el primer semestre se recibieron 225 denuncias.

En la mayoría de los casos los niños y adolescentes se quedaron al cuidado de la familia ampliada o de uno solo de los padres.

Algunas de las denuncias recibidas están relacionadas a que los padres se han “llevado” a los niños de sus escuelas sin dar aviso a los tutores y aquellos en que uno de los progenitores desea tener la custodia, tras su regreso del exterior. En las situaciones más graves los niños o adolescentes ni siquiera reconocen a sus papás porque los lazos afectivos se han debilitado.

Esta situación alerta a la Defensoría y Montaño dijo que se intensificarán los programas de apoyo y de integración familiar.

El tema de la reagrupación familiar por el tiempo de la distancia o la desvinculación familiar “que se ha podido dar por el viaje o por buscar mejores días de vida hace que en muchos casos no vuelven a formar la familia que componía” y son los hijos las víctimas del conflictos, añadió.

La Defensoría en los puntos desconcentrados en las comunas atendió 227 casos de vulneración de los derechos en contra de los niños y de los adolescentes.

Fueron denunciados 250 casos de violencia psicológica dentro de las familias y de las unidades educativas donde el agresor es el educador.

Otro problema que preocupa a la institución es irresponsabilidad materna o paterna. En el caso de la materna los conflictos se agudizan cuando ella debe asumir el rol de padre y madre en el sustento y en la educación de sus hijos descuidando a los niños.