Las respuestas a las necesidades de la población a través de políticas y gestión pública permitirán evaluar el desarrollo del proceso autonómico de un departamento, municipio o territorio indígena, explicó la ministra de Autonomía Claudia Peña.

La evaluación futura del proceso tiene que ver con el avance de los estatutos autonómicos, con las cartas orgánicas municipales, con la producción legislativa, pero sobre todo por “cómo llegan las políticas publicas a la población y de qué forma la ciudadanía percibe a su gobierno departamental más cercano a su vida cotidiana para mejorar sus condiciones de vida”.

Han habido avances en el proceso autonómico pero no lo suficiente aunque es importante decir “que es un proceso dinámico y que es una apuesta a largo plazo”.

La valoración del proceso autonómico es positiva, Peña dijo que las gobernaciones han vivido un proceso muy importante en la adecuación institucional, “han pasado de ser oficinas de representación del Presidente a ser gobiernos departamentales”.

Es un proceso complejo que demanda esfuerzo y significa adecuar las lógicas de organización institucional y además cambiar la cultura de los propios funcionarios y de la sociedad civil como “demandante de políticas o de acciones para con sus gobiernos departamentales”.