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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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ESTE ES UN TRABAJO SELECCIONADO POR EL JURADO DEL CONCURSO ESCOLAR “LA ENTREVISTA QUE SIEMPRE SOÑÉ”

“El avance tecnológico nos va a pillar en ropa interior”

“El avance tecnológico nos va a pillar en ropa interior”

En la ciudad de Tarija, el hermano Manuel Fariñas ha dedicado su vida a cultivar la educación de niños y jóvenes, es impulsor de grandes proyectos de formación académica, pero en el fondo es un hombre que lleva la solidaridad al más necesitado, y es un gran amigo de varias generaciones. Por ello, los estudiantes del 3ro. de secundaria del Colegio Hermano Felipe Palazón pidieron entrevistar al religioso y un resumen del diálogo está contenido en el siguiente texto.

P: ¿Puede contarnos algunos detalles de su infancia, sus padres y su familia, el pueblo donde nació?

R: Nací un 6 de junio de 1944, por lo tanto soy hijo de la postguerra española. Mi infancia no fue fácil: mis padres Benito y Esther, quienes adoraban a sus 5 hijos y se preocupaban de asegurar que no nos falte nada, nos sacaron adelante con el estilo de ese entonces, dándonos ejemplos de responsabilidad, compromiso y trabajo; gracias a Dios los cinco hijos respondimos positivamente.

P: ¿Qué recuerdos de su niñez le marcaron su vida?

R: Estuve en un colegio no religioso, con el 90 por ciento de profesores varones, cuya manera de educar era muy estricta, lo que afianzó mi timidez hasta que mi madre lo entendió y me ayudó… Fue una etapa dura que superé haciendo muchos esfuerzos: me aprendía todas las obras de teatro y poesías para poder salir y recitar.

P: Tenemos entendido que durante su juventud, en España, sufrió las consecuencias de la Guerra Civil. ¿Cuánto influyó esto en su vida?

R: Fueron épocas difíciles más para los mayores que nosotros. Los que éramos pequeños no nos dábamos cuenta porque gracias a Dios en casa no faltaba nada.

P: ¿Cómo halló su vocación religiosa?

R: Tengo una anécdota, aunque no creo que ése sea el único motivo. Un día, una muchacha preciosa, de 16 años, a quien conocí en un hospital con un cáncer terminal, me pidió un favor: que la visite porque su familia ya estaba cansada y ya no lo hacía. Desde entonces, nunca le dije a una persona que no tengo tiempo. Desde ese día me comprometí que si alguien me necesita, allí estaré; por eso no me casé y me hice religioso, para poder estar libre y disponible si me necesitas.

P: ¿Y cómo se animó a venir a Tarija?

R: No fue una decisión mía, nunca pensé en venir a América ni ayudar aquí… Me pidieron venir sólo por un año y acepté… Al final un año se convirtió en más y recuerdo que ni me despedí de casa.

P: Suponemos que no todo fue fácil, ¿qué momentos duros le tocó pasar?

R: Un momento difícil fue cuando los hermanos determinaron que la obra del hermano Felipe Palazón había finalizado, yo me opuse y me les enfrenté y se decidió que debía dejar Tarija. Otro momento duro fue cuando quise traer a la Universidad Católica para dar a Tarija otras alternativas, pero me lo negaron... Entonces creé la Universidad San Bernardo de Tarija, que llegó a tener 700 alumnos. Al percibir que funcionaba, la Católica pidió que se la entregáramos, lo cual fue muy duro para mí, pero al final el objetivo se cumplió.  

Otros momentos difíciles fueron las muertes de mi mamá, de mi papá y de mi hermana mayor, porque no pude estar a su lado, pero generalmente viví momentos muy bellos en Tarija.

P: ¿Qué proyectos tiene para la juventud tarijeña?

R: En este momento tenemos algo que no tiene ninguna ciudad de Bolivia: un diagnóstico científico de la realidad de la juventud, de su problemática… Para sorpresa mía, el primer problema no es el alcohol, sino el acoso, la agresión,  la violencia, el insulto. Pasaremos curso por curso con una plaquita donde diga “zona libre de acoso” y la pondremos donde nos puedan demostrar la tutora, los chicos y los padres que allí no hay un solo chico y ni una sola chica que se sienta arrinconada o despreciada, lo mismo haremos con los colegios.

P: ¿Qué personaje, circunstancia o pensamiento lo motivaron y sirvieron de guía en su vida para cumplir con sus objetivos?

R: Hay varios personajes en mi vida, entre ellos Francisco de Asís, Teresa de Calcuta, el hermano Felipe Palazón, quien me trajo a Bolivia, o Luis Espinal, a quien yo quería mucho y un día me encontré con su cadáver en un basurero en La Paz.

P: Algún mensaje a la familia tarijeña.

R: Aquí tenemos la cultura de la amistad, no hay mejor amigo que el tarijeño, pero no existe la cultura de la fraternidad… También sugeriría ser más creativos, hay mil maneras de ser feliz, de buscar salidas, de crear microempresas.

Muchas gracias, hermano…

Gracias a ustedes, ha sido un rato muy agradable, nunca había hablado con nadie de mi experiencia de niño y joven.

“En Bolivia nos estamos engañando”

P: Como educador y forjador de juventudes, ¿sobre qué aspectos cree que es necesario ahondar en la educación de la juventud boliviana?

R: Creo que nos estamos engañando, y si alguien me escucha pues que me perdone, creo que nos estamos engañando: una Reforma Educativa no puede consistir en cambiar sólo los nombres de los cursos, antes era cuarto medio y ahora es sexto. Tampoco sólo consiste en que nuestros chicos tengan un vaso de leche, de refresco, una empanadita al día y con eso creemos que ya está. Estamos en el siglo XXI y la tendencia va por otro lado: porque desaparezcan las aulas y las pizarras, y abrirles a los chicos la mente a unos universos grandes de comunicación a través de internet y todo eso. En algunos países de Europa y en Corea dentro de dos años ya no habrá libros, los chicos los tendrán en su computadora, que además será regalada. Es decir que en Bolivia nos estamos quedando y el siglo XXI nos va a pillar en ropa interior, nos va a pillar con sistemas educativos del siglo XV.

Participantes:

Rodrigo Castellanos Vaca Guzmán

Iván Arce Aramayo

Adrián Alcoba Pórcel

Carlos Hoyos Yujra

Fabricio Ibarra Mogro

Maestro guía:

Prof. Fernando Varas

Curso: 3ro de secundaria

Colegio: Hno. Felipe Palazón. Ciudad: Tarija