Suben en 50 por ciento las denuncias de maltrato y otros delitos contra los niños y adolescentes en la Defensoría de Quillacollo. El incremento de los casos se debe, según la responsable de esa institución, Cira Castro, porque los menores, profesores y padres de familia tienen mayor conocimiento de los derechos y las leyes que protegen a los niños y adolescentes.

De acuerdo a los datos estadísticos de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de Quillacollo, la gestión 2011 se atendió 1.303 denuncias de maltratos físicos y psicológicos y agresiones sexuales a menores.

Mientras que en el primer semestre de 2012 la institución atendió más de 1.000 denuncias, lo que hace suponer a Castro que al concluir el año los casos se dupliquen o tripliquen.

De las denuncias el 70 por ciento corresponde a maltrato físico y psicológico y agresiones sexuales a menores; mientras que el 30 por ciento es por problemas de conducta de los menores y asistencia familiar.

Hasta principios de junio entre la Defensoría y los Servicios Legales Integrales Municipales de Quillacollo atendieron cerca de 1.700 denuncias de delitos contra los niños, adultos y personas de la tercera edad.

“Los casos de agresiones psicológicas, sexuales y de explotación laboral contra los niños se dan en todos los ámbitos y regiones del departamento, el problema es que no todos denuncian”, indicó Castro.

PREVENCIÓN Con el propósito de frenar las agresiones físicas y otros delitos contra los menores, las Defensorías de Cochabamba trabajan en la prevención mediante talleres dirigido a los padres de familia, profesores y directores de las escuelas.

Castro destacó que el trabajo “coordinado” con la Defensoría, la Policía y el Ministerio Público colaboró para que los agresores hayan sido sancionados.