“Hay que estar atentos a que salga agua, todos se levantan para eso. Es sagrado recibir ese día”, dice don Francisco López, un vecino de Villa El Salvador, que vive en la parte alta de su barrio.

Este barrio es parte del Distrito 6 de Cochabamba y está ubicado a un par de cuadras del Biblioavión de la avenida Suecia en la zona Sur de la ciudad. El barrio comprende ocho manzanas y un total aproximado de 130 casas.

Don Francisco cuenta que en su barrio tienen agua una vez  a la semana y solamente durante aproximadamente una hora, los días martes a partir de las 6:30. Él vive con su esposa, tres hijas y su nuera.

“Llenamos seis turriles y nos tiene que durar toda la semana... Se necesita bastante agua para cocinar, lavar ropa y para el baño especialmente”, dice explicando que la carencia de agua les ha enseñado a reutilizarla como cuando lavan ropa y guardan el agua en tachos para el baño.

“Tenemos que mezquinarnos”, agrega.

El presidente de la Organización Territorial de Base (OTB) El Salvador, David Viracoche, recuerda que hace 10 años tenían agua dos veces a la semana, pero ahora es solo un día.

Ante la falta de agua los carros cisterna, llamados “aguateros”, son requeridos.

“Venden en 5,50 ó 6 bolivianos el turril, nos traen agua y de esa forma nos abastecemos”, explica el dirigente.

Los vecinos socializan la importancia de resguardar la salud y saben que hay que tener cuidado con el agua que traen los carros cisternas y que es necesario hervirla si es para consumo.
CONSUMO Y PAGO  La familia López tiene categoría R1 en su vivienda y paga cada mes 21 bolivianos por el servicio de agua potable. Asegura que no se puede pagar más porque no tienen agua todos los días.

Según información proporcionada por la anterior gerencia del Servicio Municipal de Agua potable y Alcantarillado (Semapa) más de la mitad de los vecinos del Distrito 6 no cuenta con contratos ni medidores. En este barrio los dirigentes informaron que ya ha sido regularizada esa situación aunque también reconocen  que por falta de atención de las autoridades existían conexiones clandestinas hechas por los mismos propietarios de viviendas.

Por otro lado, pese a que existen observaciones, se ha dado lugar a la firma de convenios desde el año 2003 para mantener las tarifas básicas en la zona debido a que no cuentan con el servicio diario.

“Siempre han querido hacernos subir diciendo que tenemos un convenio ilegal”, manifiesta Viracoche aclarando que los convenios se renuevan cada año y que el conflicto retorna cuando se cambia a los gerentes de Semapa (en menos de cuatro años cambiaron cinco).

Ahora, en medio de conflictos y carencia de agua los vecinos se declaran en estado de emergencia por la falta del servicio y por las observaciones. Aseguran estar dispuestos a pagar según el consumo y elevar las tarifas siempre y cuando tengan el servicio todos los días “como en otros barrios”.

Los valvuleros son cercados por vecinos para garantizar el agua

Los denominados “valvuleros” que son los trabajadores del Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Semapa) encargados de abrir las válvulas para distribuir agua en el barrio, son cercados y presionados por los vecinos para garantizar el servicio.

“A veces ellos son rodeados por los vecinos porque a veces no agarran bien el agua entonces piden más”, explica el dirigente vecinal David Viracoche reconociendo que hay amedrentamiento aunque no violencia.

El barrio está ubicado en un cerro, por tanto, los vecinos que están en las partes más bajas se benefician más con el agua. A las construcciones que están más arriba el agua llega después y a veces no es suficiente.

El exgerente del Servicio Municipal de Agua potable y Alcantarillado (Semapa), Hernán Ayala, explicó que según estudios realizados en el Distrito 6 la cantidad de agua que provee la empresa a cada familia en esa zona es de cuatro metros cúbicos al mes cuando la tarifa básica llega hasta un consumo de 12.

Existen viviendas donde los propietarios optaron por comprar e instalar tanques para almacenar el agua y garantizar su abastecimiento por al menos una semana, pero esto va también en desmedro de otros habitantes del barrio que deben esperar que llenen los tanques para recién recibir el agua en turriles y tachos.

D-6

El Distrito 6 de la ciudad está ubicado en el Sur de la ciudad, al  Norte de la laguna Alalay y es una de las zonas más afectadas por la falta de

agua potable. Según algunos datos de Semapa existen familias con conexiones pero

sin  medidores ni contratos.