Uno de los dirigentes que trabajó con tesón, voluntad, honestidad y otras cualidades en el baloncesto cochabambino y por más de cuatro décadas en busca de la superación de esta disciplina en todos los aspectos, fue sin duda el señor Israel Avilés Baptista.

OPINIÓN quiso conocer su situación actual y su deseo para la disciplina que tanto ama y a la que se debe.

OPINIÓN.- ¿Don Israel, hace que tiempo usted está vinculado con el baloncesto como dirigente?

I.A.- Son 42 a 43 años, porque llegué a la Asociación como delegado del Club 14 de Septiembre el año 1968.

O.- ¿Y como presidente de la Asociación cuántos años?

I.A.- Fui presidente de la Asociación durante 20 años, desde el año 1971 hasta el año 1991.

O.- ¿A pesar del tiempo transcurrido, se siente con ganas de volver al baloncesto?

I.A.- Sinceramente no, porque la edad, la distancia en que uno vive hacen difícil cumplir los deseos. Es por eso que no concurro al coliseo desde la gestión 2010.

O.- ¿Pero siempre está pendiente de este deporte?

I.A.- Gracias a OPINIÓN y otros medios que publican sobre el básket, siempre estoy atento, para ver qué ocurre, los equipos. Como el básket es nocturno es prácticamente difícil para mí salir en horas de la noche por la distancia en que vivo.

O.- ¿Que satisfacciones pudo vivir con el baloncesto?

I.A.- Muchas satisfacciones, particularmente durante la década del 70 al 80, donde tuvimos la suerte de intervenir, en muchas actividades, reuniones con autoridades. Época en que la Asociación de Básket era una institución fuerte. Tal es así que para organizar un campeonato sudamericano, tuvimos la osadía de exigir el techado de la Coronilla que no se pudo. Pero nuestra exigencia permitió que nos colocaran piso de parket sin tener techo, lo mismo ocurrió con el coliseo de la Costanera. Se jugó el sudamericano en esas condiciones y con las consecuentes críticas. Después gracias a la intervención del “Secre”, se pudo concretar el techado del coliseo con la empresa Galindo, pero antes hubo incumplimiento de otra empresa del mismo apellido. Esas son grandes satisfacciones aparte de los campeonatos nacionales obtenidos, donde para ese entonces no había todavía Copa Bolivia como ahora, y que dicho sea de paso Cochabamba hace 12 o 13 años seguidos logra el título de la Copa Bolivia.

O.- ¿Momentos de desilusión?

I.A.- Para un dirigente esos momentos se dan cuando pierde una campeonato y peor si es de local, otro tanto es que el público ya no es el de antes, ya que antes teníamos bastante público, pero estos últimos años asisten muy pocos, pero gracias a la voluntad de los dirigentes el básket continúa destacando a nivel nacional.