Sólo el dragado del río resolverá las inundaciones que año tras año afectan la zona agrícola de Cliza.

Este año, el 24 de enero, el desborde del río Cliza inundó a seis comunidades donde 87 familias fueron perjudicadas porque sus cultivos fueron anegados por el agua de lodo. Un total de 17 hectáreas de cultivos de maíz fueron afectadas y cerca de 9 se perdieron. Las comunidades son Huerta Huasa, Presa Pata, Villa Surumi, Santa Lucía, Final Batista y Villa Rosario.

La solución pasa por el dragado del río Cliza en su recorrido porque el cauce se reduce ocasionando inundaciones en la zona agrícola de Cliza, explica el director de Planificación del municipio, Edwin Terceros.

El municipio prepara un proyecto para el dragado del río Cliza que viene de Toco, pasa por Cliza y llega hasta Tolata. Edwin Terceros indica que el Fondo de Inversión Productiva y Social ya realizó la evaluación “e indicaron que pueden presentar el Proyecto en el Plan de Emergencia” y así lograrían concretarlo en la época seca y evitar más problemas en el próximo invierno.

El problema es recurrente, reclama Alicia Inturrias que tiene su sembradío en Villa Surumi, “cada año es lo mismo y las autoridades no nos ayudan en nada”, protesta Inturias a tiempo de explicar que ella tiene su propia bomba de agua para desfogar el agua a lotes baldíos, en su intento de rescatar algo de su cosecha.

Cliza tiene una extensión de 55 kilómetros cuadrados y el 80 por ciento está destinado a la producción agrícola, principalmente al maíz y también alfalfa.

Los comunarios no pierden las esperanzas de remediar la siembra, ayudados con bombas de agua y azadones quieren disminuir el caudal porque si sus raíces se remojan por más de tres días, la siembra está perdida, explica Terceros.

En los casos en los que el maíz está en flor existen posibilidades de recuperar la cosecha que estaría lista para Carnaval.

Cliza, es el municipio productor de maíz blanco más importante del país.

Con ayuda del Servicio Departamental de Caminos (Sedcam), el municipio de Cliza retiró la sedimentación del río, pero no fue suficiente. El Sedcam destina 200 horas de trabajo al municipio, pero en ese tiempo sólo se realizó la limpieza de la tercera parte del área vulnerable, es decir un kilómetro de tres.

Ejecutar trabajos, sin apoyo del Sedcam, llegaría a 40.000 dólares y el municipio no cuenta con esos recursos, aclara Terceros. El municipio apoya a los comunarios con herramientas menores y bombas de agua y se encuentran a la espera de apoyo de la Gobernación.