Senador del MAS confirma que existe coca excedentaria en todos los Yungas
23 de enero de 2012 (10:38 h.)
El senador del Movimiento al Socialismo (MAS) Fidel Surco, confirmó que en todo el sector de los Yungas de La Paz existe coca excedentaria la cual debe ser erradicada pese al descontento de algunos dirigentes de la Asunta central que afirmaron que no permitirán la presencia de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC).
El legislador representante de la región recomendó al gobierno concertar el diálogo con los dirigentes que se resisten a la erradicación, al afirmar que en sus tierras el cultivo de cocales estaría controlado por el control social reconocido en la Constitución Política del Estado (CPE). “Existe coca excedentaria no vamos a negarlo, existe en todos los Yungas, en todo el norte de La Paz, existe y creemos que los dirigentes deben flexibilizar su posición y resolver el problema con el gobierno (…), la Fuerza de Tarea Conjunta tienen que volver a trabajar porque hay coca excedentaria y eso no lo vamos a negar, hay zonas rojas que están fuera del catastro, entonces lo que el gobierno debe hacer es limitar y clasificar las áreas de producción de coca, en Bolivia hay que definir cuantas hectáreas hay en los Yungas y cuantas en el trópico de Cochabamba”, manifestó Surco a la ANF.
Asimismo acusó algunos dirigentes de la región de tomar una posición política del tema con la finalidad de confrontar al gobierno con la región. El dirigente Pascual Mamani, Secretario General de los cocaleros de La Asunta, dijo que el gobierno aceptó la expulsión de las (FTC), de al menos tres centrales de la región que rechazaron el convenio de racionalización de cultivos de hoja de coca excedentaria, con lo que suspendieron toda medida de presión.
La dirigencia asegura que no permitirán que se racionalice la coca excedentaria en esta región, las comunidades en conflicto pertenecen a la ex Hacienda Callisaya y datan de 1960, por lo tanto son originarias. El 90 por ciento de la coca ilegal ya fue erradicada en otros sectores de La Asunta, según el viceministro de la coca, el resto estaría en estas tres centrales. Una veintena de militares que resguardaban el campamento de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) en La Asunta tuvo que replegarse el domingo 8 de enero, tras una protesta de los cocaleros de tres centrales que denunciaron abusos en la erradicación.
El legislador representante de la región recomendó al gobierno concertar el diálogo con los dirigentes que se resisten a la erradicación, al afirmar que en sus tierras el cultivo de cocales estaría controlado por el control social reconocido en la Constitución Política del Estado (CPE). “Existe coca excedentaria no vamos a negarlo, existe en todos los Yungas, en todo el norte de La Paz, existe y creemos que los dirigentes deben flexibilizar su posición y resolver el problema con el gobierno (…), la Fuerza de Tarea Conjunta tienen que volver a trabajar porque hay coca excedentaria y eso no lo vamos a negar, hay zonas rojas que están fuera del catastro, entonces lo que el gobierno debe hacer es limitar y clasificar las áreas de producción de coca, en Bolivia hay que definir cuantas hectáreas hay en los Yungas y cuantas en el trópico de Cochabamba”, manifestó Surco a la ANF.
Asimismo acusó algunos dirigentes de la región de tomar una posición política del tema con la finalidad de confrontar al gobierno con la región. El dirigente Pascual Mamani, Secretario General de los cocaleros de La Asunta, dijo que el gobierno aceptó la expulsión de las (FTC), de al menos tres centrales de la región que rechazaron el convenio de racionalización de cultivos de hoja de coca excedentaria, con lo que suspendieron toda medida de presión.
La dirigencia asegura que no permitirán que se racionalice la coca excedentaria en esta región, las comunidades en conflicto pertenecen a la ex Hacienda Callisaya y datan de 1960, por lo tanto son originarias. El 90 por ciento de la coca ilegal ya fue erradicada en otros sectores de La Asunta, según el viceministro de la coca, el resto estaría en estas tres centrales. Una veintena de militares que resguardaban el campamento de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) en La Asunta tuvo que replegarse el domingo 8 de enero, tras una protesta de los cocaleros de tres centrales que denunciaron abusos en la erradicación.
