Este 18 de diciembre, los municipios de Quillacollo en Cochabamba, Sucre de Chuquisaca y Pazña de Oruro realizarán comicios para elegir a su máxima autoridad municipal.

En los tres municipios hubo destituciones a sus autoridades y según las leyes actuales, sólo los alcaldes deben ser reelegidos.

Quillacollo es el segundo municipio de mayor importancia en Cochabamba. Este domingo elegirá a un nuevo Alcalde luego de atravesar una larga crisis municipal desde el año 2004, tiempo en el se cambiaron a once alcaldes.

Tres abogados: Charles Cristhian Becerra de la agrupación ciudadana Unidad Nueva Esperanza (UNE), Miguel Edwin Guzmán Achá del Movimiento Al Socialismo (MAS), y René Fernández Céspedes del Movimiento Sin Miedo (MSM) afirman que asumen el reto de conducir un municipio que debe superar la crisis municipal y política.

La provincia de Quillacollo cumplió 106 años y fue creada el 14 de septiembre de 1905 en la presidencia de Ismael Montes.

ENTRE MASISTAS La crisis inicia el año 2004, cuando el alcalde electo, Ricardo Mercado del MAS, fue retirado del cargo por presión de militantes de su mismo partido bajo el argumento de la ejecución de un plan maestro de agua potable irregular. Luego le siguieron varios cambios, por presiones y movilizaciones populares hasta bochornosas, entre masistas y uno del UNE (Héctor Cartagena).

En las últimas elecciones municipales (4 de abril de 2010) Héctor Cartagena de UNE fue suspendido luego de que concejales del MAS interpusieran procesos en su contra por el delito de corrupción. La abogada, Carla Lorena Pinto del MAS asumió el cargo de manera interina; al concluir el interinato se convoca a nuevas elecciones.

Los quillacolleños, pese a la crisis de gobernabilidad, se muestran dispuestos a asistir a las urnas y esperan que el elegido se preocupe principalmente del tema del agua y la inseguridad ciudadana.

POBLACIÓN La población en Quillacollo, según la proyección del Instituto Nacional de Estadística 2010, ha rebasado la proyección y las expectativas y llegó a 142.724 habitantes. Sin embargo, el presidente del Concejo, Gílmar Terrazas, cree -en base a las conexiones de alumbrado domiciliario y de agua- que la población supera los 300 mil habitantes, producto de un proceso acelerado de migración, provenientes de Oruro, La Paz, Potosí, y municipios vecinos de la cordillera. Según Terrazas la población migrante se acerca al 50 por ciento .

SERVICIOS Al ser Quillacollo, una ciudad de tránsito, atiende gran parte de las necesidades de pobladores del Valle Bajo, y de poblaciones de la cordillera. Esta situación puso en aprietos a instituciones prestadoras de servicios de salud, agua, alcantarillado, y alumbrado público. La Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Emapaq) sólo cubre al 40 por ciento de la población. Nadie en Quillacollo consume agua potable, la actual provisión de agua es de pozos profundos que no siguen procesos de tratamiento, y cuyas aguas residuales desembocan al río Rocha.

SALUD Este municipio sólo cuenta con un hospital de referencia, conocido como el Hospital de Quillacollo “Benigno Sánchez”, que desde el año 2007 continúa en refacción, tiempo en que funcionarios municipales y adjudicatarios se vieron involucrados en estafas por más de Bs 1’600.00. Cinco postas de salud y alrededor de 20 clínicas privadas tratan de cubrir este servicio, sin embargo, los casos críticos son derivados a otros hospitales de la capital del departamento. Gran parte de la población, aún se atiende con la medicina natural.

EDUCACIÓN 17 edificaciones educativas albergan en 3 turnos a toda la población estudiantil. La formación superior poco a poco va ganando espacio con la desconcentración de facultades de la Universidad Mayor de San Simón, como la Facultad de Derecho y Veterinaria y la normal Simón Rodríguez.

PRODUCCIÓN Uno de los retos es superar la presión de la mancha urbana hacia las tierras agrícolas que amenazan al 60 por ciento de las tierras productivas y de pastoreo, donde el principal potencial es la floricultura, la producción de hortalizas, papa, y la crianza de ganado lechero y lanar.

Entre los municipios con más delincuencia

La inseguridad ciudadana es uno de los temas urgentes que debe resolver la futura autoridad. Quillacollo ya sido catalogada como uno de los tres municipios a nivel nacional con el mayor índice delictivo, junto a El Alto y Montero, según el informe del Viceministerio de Seguridad Ciudadana dentro del Plan Ciudad Segura lanzada en enero de 2011.
En Quillacollo, un promedio de 4.3 hechos delictivos al día son atendidos por la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de un total de 132 casos en el mes de noviembre. Asimismo, la División de Protección a la Familia reportó 210 casos entre los que se encuentran los delitos de violación y maltrato intra familiar, según informó el comandante regional de la Policía de Quillacollo, Gualberto Albornoz.
Según el reporte, 14 homicidios fueron atendidos en noviembre, 4 casos de crimen organizado, 43 delitos contra las personas, 23 casos contra el menor y la familia, 25 delitos contra la propiedad, 11 delitos económicos y financieros, y 12 denuncias de corrupción.
MIGRACIONES Para Albornoz el principal factor del alto índice delincuencial, principalmente en violaciones y robos, es producto de las migraciones de padres que dejan a los hijos con “dinero a manos llenas”, quienes desde los 10 años se reúnen en grupos y discotecas para consumir bebidas alcohólicas y drogas.
La segunda causa es atribuida a la proliferación de centros de espectáculos con la actuación de grupos musicales principalmente en la avenida Blanco Galindo, los fines de semana.