Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 29 de marzo de 2024
  • Actualizado 00:00

SE ADVIERTE LOS PROBLEMAS MEDIOAMBIENTALES Y LA CONDICIÓN DE PARQUE PROTEGIDO, PERO SE AFIRMA QUE SE CUMPLIÓ CON TODO LO QUE DISPONE LA LEY

La OAS definió ruta del TIPNIS

La OAS definió ruta del TIPNIS



La empresa brasileña OAS definió el tramo de construcción de la carretera que unirá los departamentos de Cochabamba y Beni el año 2008, trazo que en su segundo tramo, prácticamente parte el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure. Autoridades de Gobierno afirman que ese trazo no fue definido aún por lo que no tendría justificación la protesta indígena que con una marcha exige que la vía no afecte su territorio.

Según documentos oficiales conocidos por Opinión, la OAS, el año 2008 resumió en 39 páginas el proyecto, donde se define el trazo casi por el medio, del Parque, “apoyado” hacia la parte izquierda. El portafolio incluye mapas de América del Sur, Bolivia y del tramo donde se construirá la carretera.

El documento de la OAS, dice por ejemplo, que el proyecto “Villa Tunari – San Ignacio de Moxos, se encuentra ubicado en los departamentos de Cochabamba y Beni, ubicado entre la sierra sub andina y la llanura chato –beniana, con topografía semi ondulada y plana”.

En antecedentes, señala que “desde la Colonia se planificaron caminos de penetración, la necesidad del país es la de integrar al Beni y Pando en la actividad comercial para el transporte de productos hacia los mercados potenciales del sudoeste y oeste y a los mercados internacionales del Pacífico”.

Agrega que “desde comienzos del siglo pasado financiados por Antenor Patiño se construyeron caminos de penetración hasta Puerto Patiño. En la década de los 60 por las prospecciones petroleras, YPFB realizó mejoras y amplió el tramo hasta Campamento Parker, en la escuela Ichoa.

El documento de la constructora OAS del Brasil, agrega:

“Por encargo de la Prefectura de Cochabamba se realizó un estudio desde Isinuta hasta escuela Ichoa. A partir de esa población sólo existe una senda, y en los últimos años un mejoramiento para llegar a San Ignacio de Moxos.

El camino Villa Tunari – San Ignacio de Moxos presenta cuatro características:

1.      Villa Tunari – Isinuta: plataforma mejorada con ripio de 6,5 metros de ancho (alcantarillas de reducido diámetro y puentes en los cursos de agua).

2.      Isinuta –Escuela Ichoa: camino de penetración mejorado con ripio, sin obras de drenaje, la ruta es sinuosa (horizontal y verticalmente).

3.      Escuela Ichoa – Monte Grande: no hay ruta de camino.

4.      Monte Grande - San Ignacio de Moxos, senda abierta hasta los 40 kms. y 60. Km antes de San Ignacio con mejoramiento.

Clima húmedo tropical con temperatura media de 25 a 30 grados. Precipitaciones pluviales de 5.000 milímetros al año, reduciendo a 2.500 milímetros por año en San Ignacio de Moxos. Una altitud de 290 metros sobre el nivel hasta 165 metros sobre el nivel del mar.

Se garantizará un periodo de servicio de 50 años. El diseño estructural se ha realizado bajo las normas AASHTO 202. Los diseños de arte mayor se han realizado para nivel de aguas máximas de diseño y verificados para un periodo de 200 años.

En el acápite de “Prevención y Mitigación Ambiental” se señala que se ha tomado en cuenta todas las exigencias de la Ley 1333 y sus reglamentaciones.

Respecto a medioambiente se señala: “Cumplimiento de la Ley de Medio Ambiente 1333 y sus reglamentaciones, alto costo por ser una zona protegida y sensibilidad ecológica muy grande (Trabajo muy especializado de alto costo). Parques protegidos, especies de fauna y flora muy sensibles. Trabajo medioambiental de mitigación complicado y de gran magnitud. Relacionamiento comunitario extenso”.

En cuanto a riesgos señala: Alto índice de riesgo, por la modalidad llave en mano, condiciones topográficas, geológicas, logísticas, falta de acceso a la obra, condición sociológica de la región, parques protegidos, uso de transporte no convencional (helicópteros)”.

PROYECTO Según la ABC, la construcción del camino se realizará en tres tramos: el primero desde Villa Tunari hasta Isinuta de 47 km y que incluye la construcción del puente sobre el río Isinuta que facilitará el acceso permanente al TIPNIS; el segundo desde Isinuta hasta Monte Grande atravesando el TIPNIS; y el tercero desde Monte Grande hasta San Ignacio de Moxos.

Actualmente, existen 45 km. de camino empedrado desde Villa Tunari hasta el TIPNIS. Al interior del TIPNIS existe una ruta de penetración en mal estado de 46 km. En los restantes kilómetros que atravesarían y dividirían la zona núcleo del Parque no existen caminos de acceso ni sendas, hasta llegar a los últimos 40 km, próximos a San Ignacio de Moxos, en Beni.

Datos.

Constitución Política

El Art. 30 de la Constitución Política del Estado reconoce el derecho a la tierra, territorio y territorialidad de los pueblos indígenas.

En el Art. 393 el Estado reconoce, protege y garantiza la propiedad individual y comunitaria o colectiva de la tierra, siempre que cumpla la función social.

Derechos y atribuciones

La Tierra Comunitaria de Origen (TCO), implica

derechos, atribuciones y

competencias especiales,

establecidas en la Constitución. (Art. 403): La TCO, equivalente al territorio indígena originario campesino, es integral; la TCO implica derecho a la tierra; en la TCO existe el derecho del uso y aprovechamiento exclusivo de los recursos naturales renovables en las condiciones determinadas por la ley.

Isiboro Sécure

El Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) tiene aproximadamente 1.236.296 ha (12.363 km²). Entre los departamento del Beni y Cochabamba.

Derechos de los indígenas y parque

Se reconoce desde 1994 el derecho de los pueblos indígenas sobre sus Tierras Comunitarias de Origen (TCO) indivisibles, imprescriptibles, inalienables e inembargables.

El derecho propietario colectivo del TIPNIS fue consolidado en 2006. El Estado se comprometió a proteger y garantizar esa propiedad comunitaria colectiva (Art. 394, CPE). La garantía del Estado implica el reconocimiento y respeto de la indivisibilidad, imprescriptibilidad, inembargabilidad, inalienabilidad e irreversibilidad de la TCO.

El TIPNIS cumple la función ambiental en su calidad de Área Protegida.

La construcción del camino Villa Tunari - San Ignacio de Moxos sin consulta pública a los pueblos del TIPNIS contraviene los artículos 30, 343 y 345 de la Constitución Política del Estado relativos al derecho de la población a la consulta previa sobre decisiones que pudieran afectar a la calidad del medio ambiente; los artículos 25, 26 y 93 de la Ley del Medio Ambiente; el Convenio 169 de la OIT ratificado por ley 1257, y la Declaración Universal de Derechos Indígenas ratificada por ley 3760.

La OAS se adjudicó la construcción de casi mil kilómetros de carreteras en todo el país

La empresa brasileña OAS, que tiene a su cargo la construcción de la polémica carretera entre Villa Tunari y San Ignacio de Moxos (306 kilómetros), para unir Cochabamba y el Beni, cuenta con varias otras obras viales para ejecutar en el país, según documentos divulgados por la Liga de Defensa del Medio Ambiente (LIDEMA).

Señala que los grandes proyectos viales en el país evidencian los intereses comunes y los estrechos vínculos entre las empresas constructoras, las consultoras a cargo de costosos estudios y supervisión de la calidad de las inversiones, y burócratas estatales responsables de procesos de adjudicación y licitación.

La empresa OAS se adjudicó proyectos viales importantes licitados en el gobierno del presidente Evo Morales, como por ejemplo la carretera Potosí-Uyuni de 201 km, que vincula a la reserva de litio más grande del mundo y uno de los principales atractivos turísticos del país, valuada en 83,29 millones de dólares y financiada por la CAF.

Agrega que OAS también se encarga de la construcción de 240 Km de la ruta Potosí-Tarija de 410 Km en el sur del país con un crédito PROEX del Banco do Brasil y garantía de la CAF, originalmente adjudicada a la constructora Queiroz Galvao.

Ahora OAS se encarga de la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos, mediante contrato suscrito con la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC). Esta carretera tendrá un costo de 415 millones de dólares por 307 km a construir.

LIDEMA recuerda que a raíz de varias denuncias de instituciones cochabambinas, desde julio de 2009 la Contraloría General del Estado estaría realizando una auditoría a la licitación y adjudicación del contrato, sin resultados aún.

OAS contrató a la empresa boliviana CONNAL para que realice estudios y diseños del proyecto Villa Tunari – San Ignacio de Moxos. CONNAL también ha sido contratada por la ABC para que controle y supervise a OAS en el proyecto Potosí – Uyuni.

“Este conflicto de intereses no sólo resta transparencia y credibilidad a la supervisión de la ruta en Potosí, sino que pone en duda los criterios adoptados y la profundidad del análisis sobre la viabilidad económica y ambiental, y los impactos ambientales y sociales de la carretera que uniría Cochabamba y Beni”, dice LIDEMA.

Agrega que el Estado boliviano contaba con 4 millones de dólares comprometidos por la CAF para realizar estudios independientes que permitieran evaluar la factibilidad económica, ambiental y social de la ruta Villa Tunari – San Ignacio de Moxos, considerando la importancia de un área protegida con categoría de Parque Nacional, y que a su vez es un territorio indígena comunitario. La realización previa de estos estudios, señala, aportaría elementos para definir si se continuaba o no el proyecto, o si se postergaban las obras. Sin embargo, el Gobierno prefirió construir la carretera pasando por alto criterios técnicos y ambientales.

La ruta es un proyecto de gobiernos de izquierda y derecha

La construcción de la carretera que una Villa Tunari, en Cochabamba, con San Ignacio de Moxos en el Beni, es una antigua aspiración de grupos económicos y políticos, según una investigación divulgada por la Liga de Defensa del Medio Ambiente.

Señala que desde los años 90 se impulsaba la construcción de la carretera por las Prefecturas de Beni y Cochabamba, entonces a cargo de “grupos políticos con intereses madereros y ganaderos, empresas petroleras, y colonizadores de la región del Chapare que buscan acceder a nuevas tierras de cultivo”.

El Decreto Supremo 25134 de 1998, que responde al Plan de desarrollo “El Cambio para Todos” de Gonzalo Sánchez de Lozada, estableció un Sistema Nacional de carreteras constituido por una Red Fundamental de 10.401 Km. de vías prefecturales y municipales y algunas mega obras carreteras.

Se priorizó la vinculación con Brasil, Argentina, Chile o Perú. El plan era sumar tramos a la Red Fundamental, que supera los 16 mil kilómetros.

Mediante Decreto Supremo 26996 del 23 de abril de 2003, el gobierno de Sánchez de Lozada incluyó dentro de la red fundamental de carreteras el tramo comprendido entre las localidades de Villa Tunari y San Ignacio de Moxos, y el Servicio Nacional de Caminos asumió la responsabilidad de construir la ruta.

El gobierno de Carlos Mesa autorizó al Poder Ejecutivo buscar el financiamiento para la construcción y asfaltado de la carretera Cochabamba - Trinidad mediante Ley No. 2530 del 24 de octubre de 2003, en cumplimiento de la Ley 717 del 15 de febrero de 1985 del gobierno de Siles Zuazo.

Esa Ley de Siles Zuazo señala: “Las obras camineras destinadas a vincular el departamento del Beni con otros de la República, obligatoriamente deben constituirse, desde ambas puntas de camino, cualquiera sea la fase de su ejecución”.

Desde 2003, la carretera es parte del corredor biocéanico Brasil – Bolivia - Chile y Perú del IIRSA.