Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
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Reunión popular de integración andina

Reunión popular de integración andina
El fin de la semana pasada, se desarrolló en Cochabamba una reunión de representantes de movimientos sociales de los países de la Comunidad Andina de Naciones.

Los asistentes venían en representación no oficial de los cinco países andinos, Bolivia, Ecuador, Perú, Colombia y Venezuela. Sus conclusiones serán transmitidas a sus gobiernos como sugerencias que se traduzcan en leyes o tratados internacionales.

En las mesas de discusión, en las ceremonias, en general, en el campo ferial de Alalay, donde se realizó lo que se denominó las Jornadas de Participación Ciudadana en la Integración Regional, se observó que los participantes provenían de organizaciones sindicales y étnicas en su mayoría.

En estas jornadas hubo reflexión, discusión de ponencias de las diversas delegaciones, y paralelamente se celebraba ritos propios de las regiones andinas de estos cinco países.

Casi todas las intervenciones tenían un componente común: la inclusión de sus representados en las grandes decisiones que los afectan, y de los que hasta ahora estaban ausentes y marginados. En otras palabras, exigían su inclusión en las políticas de relacionamiento de los países; que se los tome en cuenta  como sujetos protagonistas en la integración con beneficios que traen establecimiento de mercados regionales, políticas sociales, acuerdos políticos,  para estos movimientos sociales.

En un análisis más amplio, es preciso señalar que esta reunión, junto con muchas, también internacionales, que se suceden con frecuencia en países de América Latina, son expresión de la emergencia política de clases sociales del continente, que hasta hace poco sólo eran observadoras lejanas de discusiones y decisiones de las “clases políticas”.

Ha sido necesario un largo tiempo (contado por siglos) hasta llegar a esta época en que las grandes poblaciones originarias sienten que se ha abierto una puerta ancha para acceder al poder político. Pero, no sólo los indígenas trasponen el umbral antes vetado; también lo hacen colectivos populares antes marginados.

Sería una ciega equivocación de los políticos tradicionales verlos como intrusos que osan relevarlos, sin entender que llegó la hora de acercarse a ellos para trabajar juntos por una sociedad que incluye a todos.