El capitán de Guabirá, Doyle Vaca, una vez terminado el partido contra Bolívar, que concluyó seis a uno, reunió a sus compañeros y llamó la atención de todos de forma ácida.

“Dejémonos de joder”, alcanzó a escuchar la audiencia de Erbol en la transmisión del encuentro cuando Vaca se dirigía a todos en la misma cancha del estadio Siles.

El tono era de reflexión y de acuerdo con lo manifestado de forma posterior, el llamado de atención era para todos.

“Nos estaban goleando y teníamos cuatro delanteros”, afirmó el defensor enojado con la producción del equipo en La Paz.

Mientras el entrenador Claudio Marrupe aseguraba que las cosas habían salido mal y que algunos jugadores habían sentido los efectos de la altura, las explicaciones de los jugadores no coincidían con las de su entrenador.