El opositor chileno Carlos Ominami afirmó hoy que su país no puede ser un "gigante egoísta" con más 4.000 kilómetros de costa "que no es capaz de romper el enclaustramiento boliviano", luego de entrevistarse con el presidente Evo Morales.

Ominami, su hijo, el excandidato presidencial Marco Enríquez-Ominami, y otros políticos de ese país visitaron ayer en el Palacio de Gobierno al mandatario boliviano, que anoche también se reunió a solas con el segundo de ellos en su residencia.

"Chile no puede ser este gigante egoísta que tiene más de 4.000 kilómetros de costa, que no es capaz de romper el enclaustramiento boliviano y no cabe la menor duda de que el enclaustramiento ha sido un factor que obstaculizó" el desarrollo de Bolivia, dijo Ominami.

Los políticos visitaron a Morales antes de concluir el "Encuentro político binacional Bolivia-Chile: Construyendo una mirada común", organizado por la fundación alemana Friedrich Ebert para analizar las relaciones bilaterales.

En el foro, participaron también el exsubsecretario chileno de Defensa, Gabriel Gaspar, el excónsul chileno en La Paz, Ricardo Herrera, y diplomáticos y analistas bolivianos.

Bolivia y Chile se distanciaron en marzo pasado, tras cinco años de acercamiento, luego de que Morales anunciara que llevará a Cortes internacionales la aspiración boliviana de recuperar el acceso al Pacífico que el país perdió en una guerra librada a fines del siglo XIX.

El presidente chileno, Sebastián Piñera, ha pedido a Morales que elija entre el diálogo y la demanda, y que respete el Tratado de 1904 que definió los límites entre ambos países tras la guerra.

Ominami, también exsenador y presidente honorario de la Fundación Chile 21, señaló que trabajarán por el restablecimiento del diálogo porque no puede ser que los avances "vuelvan a un punto muerto". También dijo que como parte de la oposición insistirá en que las relaciones sean reencauzadas para que este conflicto bilateral, "que es probablemente el más antiguo de América del Sur", tenga una solución, para que la región pueda proyectarse en su desarrollo.

Un llamado similar a restablecer el acercamiento fue realizado el jueves por la noche por Enríquez-Ominami que, tras entrevistarse con Morales, dijo que se debe volver al diálogo "no mañana, ahora" porque la desintegración tiene un "costo" para las dos naciones.

Al término de la reunión de ayer en el Palacio de Gobierno, el ministro boliviano de Exteriores, David Choquehuanca, destacó la visita y la personalidad de Ominami y consideró que sus opiniones representan las de un influyente sector en Chile.

También dijo que si bien existen comunicaciones con autoridades chilenas para hablar, por ejemplo, sobre tarifas portuarias, aún resta que Chile haga una nueva convocatoria a una cita pendiente desde el año pasado para analizar el tema marítimo en Santiago.

Para el gobierno de Morales, la continuación del diálogo y la demanda en tribunales internacionales no son excluyentes, aunque para la administración de Piñera sí son incompatibles.