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  • Diario Digital | jueves, 18 de abril de 2024
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Tevez puede ver la práctica de Brasil y espía desde su casa

Tevez puede ver la práctica de Brasil y espía desde su casa

Carlos Tevez es junto a Lionel Messi el futbolista más querido por los hinchas argentinos, pero en las últimas horas se pudo haber convertido además en un inesperado espía del gran rival de la selección albiceleste, Brasil.

El delantero del Manchester City vive enfrente de la cancha donde los pentacampeones del mundo se preparan para la Copa América que comenzará el próximo viernes en la Argentina.

Brasil duerme con el enemigo en Los Cardales, a 60 kilómetros de Buenos Aires, una ciudad en la que sumados sus alrededores viven 12 millones de personas. Y sin embargo, la casualidad determinó que el equipo dirigido por Mano Menezes se haya concentrado en un hotel de lujo que cuenta con dos canchas de fútbol, un campo de golf y varias residencias privadas, una de las cuales es la que Tevez utiliza para descansar cuando regresa a la Argentina después de cada temporada europea.

Hasta este lunes, día en el que el delantero se sumó a la concentración del seleccionado argentino comandado por Sergio Batista, Tevez sólo tendría que haber corrido la cortina de su casa de descanso si quería ver el entrenamiento de los brasileños. Aun más cerca, a 30 metros de su residencia, queda el salón de conferencias en el que los futbolistas hablan con el periodismo.

A través de un amplio ventanal, desde esa sala de prensa en la que sobresalen los escudos verde y amarillo de la Confederación brasileña se ven con nitidez los 100 globos celestes y blancos, en forma de bandera argentina, con los que Tevez mandó a decorar el exterior de su casa.

En los últimos días se repitió en varias ocasiones otro hecho curioso: el ex goleador del Corinthians salía de su residencia, caminaba unos pocos metros por el interior del barrio privado Sofitel Los Cardales y se cruzaba con los periodistas brasileños que cubren la información del seleccionado de su país.

El fin de semana, incluso, los enviados de globoesporte.com, Leandro Canonico y Marcio Iannacca, tocaron el timbre de la casa en la que Tevez pasaba sus últimos días libres antes del inicio de la Copa. Y para sorpresa de los reporteros, en vez de haber sido un familiar, un amigo o un empleado de la casa quien se encargara de contestar el llamado a la puerta, fue el propio futbolista quien se asomó del otro lado.

"Hola", les dijo Tevez, vestido de jean y camiseta de mangas cortas, y de inmediato le restó importancia a que su casa tuviera vista directa al campo de entrenamiento de los brasileños. "A mí me da lo mismo, no hay diferencia", respondió el delantero argentino, encogiéndose de hombros.

En sus ratos libres, Tevez suele jugar al golf en el campo que colinda entre la casa en la que se alojó en los últimos días y el lugar en donde se entrenan los brasileños, que sin saberlo dormían con el enemigo.