Tras la crisis financiera y los efectos en el cambio climático a nivel mundial está surgiendo un nuevo orden internacional ya que el mundo actual es un mundo de mayor conectividad ya que países y empresas que antes se consideraban ajenas entre sí, hoy se ve que todos estamos íntimamente conectados y todo lo que pasa afuera nos afecta también a nosotros. La crisis financiera ocurrida en EEUU y los movimientos sísmicos en Japón son un problema donde todos estamos atentos a lo que pasa buscando soluciones a estos problemas ya que querer es poder.

El mundo de hoy es un mundo cambiante de mercados que se caracterizan por patrones muy cambiantes del comercio, la inversión y la oportunidad y este mundo se está convirtiendo en un motor cada vez más importante de la economía mundial. El comercio interregional crece sin fronteras ya que una empresa puede vender sus productos donde quiera sin limitaciones ni fronteras, las inversiones externas son sumamente necesarias en todos los países para generar la producción y el empleo y finalmente las oportunidades para hacer negocios y emprender nuevas empresas está de moda y todos los países fluyen en esta dirección. Nos encontramos ante una nueva economía multipolar que evoluciona rápidamente en la que algunos países como China están emergiendo como potencias económicas en forma muy rápida, otros países comienzan a convertirse en nuevos polos de crecimiento utilizando de manera adecuada sus recursos naturales como Brasil y algunos países tienen dificultades para ubicarse con su potencial que tiene en este nuevo sistema como es el caso de Bolivia ya que ahora los puntos centrales son de una brújula para indicar la nueva ruta a la cima ejecutiva evaluando los diversos caminos para llegar a un objetivo y escoger uno de ellos para lograr tener un crecimiento económico, producir alimentos con valor agregado y generar más empleo en nuestra población evitando tanto descontento por el efecto del mal manejo de nuestra economía. Querer es poder.

La economía mundial se está reequilibrando y estamos presenciando un cambio hacia múltiples polos de crecimiento y a medida que las clases medias van aumentando en los diferentes países, miles de millones de personas se incorporan a esta economía de consumo y los nuevos modelos de integración combinan la intensificación regional con la apertura mundial. Las clases medias son la pieza clave para dirigir un país, ya que son los sectores que viven en áreas urbanas, tienen acceso al conocimiento y la educación superior universitaria, tienen ideas creativas, tienen relaciones personales, tienen una mayor experiencia de manejo ejecutivo, tienen mayor visión a futuro, son emprendedores y estos son los sectores más importantes en una sociedad. El Gobierno debe contar con la participación de estos sectores para triunfar en sus planes de lograr mejoras en nuestro país. Hoy la crisis en Bolivia es una crisis económica generando el descontento social ya que no existe trabajo, no existen inversiones, no existe producción, no existe dinero circulante en el mercado y no existe la visión de nación que todos buscamos para construir todos un país de éxito con visión de futuro que se adecúe a este mundo moderno y cambiante buscando la sinergia de esfuerzos y una mayor participación y coordinación ya que todos tenemos los mismos objetivos y estamos en el mismo barco que nos pueda llegar a recuperar nuestro mar ya que al hombre que hace todo lo que puede no podemos decirle que no hace todo lo que debe.