Mientras el exzar antidrogas Ernesto Justiniano advertía ayer que las redes del narcotráfico lograron incrustarse en altas esferas de la Policía y del Gobierno boliviano, los uniformados de distintos grados de la Policía cochabambina confesaron sentirse “shockeados” y devastados por la revelación de que el jefe de Inteligencia, que los perseguía a ellos para detectar cualquier hecho de corrupción, está implicado en una banda internacional de narcotraficantes. 

Todos recuerdan a Sanabria como un hombre “de hierro, estricto, el mejor alumno de la DEA y que aparentaba ser muy recto”. Fue Director nacional de la Felcn el 2007 y 2008 en el gobierno de Evo Morales. También fue presidente del Tribunal Nacional Disciplinario que confirmó la sentencia de los coroneles José Copa e Ismael Medina, procesados por negligencia en el rescate de los policías linchados en Epizana, el 2008. “Por eso se ganó el respeto de muchos de nosotros, pues creíamos que entre jefes se iban a socapar y no fue así”.

Otra fuente policial dijo que Sanabria confesó su lealtad al MAS y se convirtió en la mano derecha del Ministerio de Gobierno. “Tanto es así, que su generalato activo no duró un año, de enero a enero, como ocurre con todos los jefes, sino que extendieron su mandato por un año y 8 o 9 meses, por la preferencia de la que gozaba en el Gobierno”.

“Ha sido un balde de agua fría para todos, René Sanabria, Milton Sánchez que fue director de la Felcn cochabambina por dos años, Oña, Siles, todos ellos tenían una imagen intachable que era mentira, pero ninguno de ellos habría arriesgado su carrera, su pecho lleno de medallas, si la tentación no hubiera sido grande y si no habrían recibido apoyo de algún padrino político, esos nombres recién saldrán a la luz”, opinaron.

NO FUE EL GOBIERNO Para el exviceministro de Defensa Social, Ernesto Justiniano, lo más grave de la detención de Sanabria, es que no fue el Gobierno el que lideró la investigación y la captura, sino la DEA de Panamá y Estados Unidos. “Esto nos demuestra la ineficiencia del Ministerio de Gobierno y de la misma Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) y que los narcos han penetrado al Gobierno, en sus altas esferas”.

Y para explicar su afirmación, Justiniano enumeró varios hechos: en los últimos cinco años,la producción de coca en el trópico de Cochabamba y en los Yungas se incrementó en más del 100 por ciento, según él. Otro elemento es el descubrimiento de personajes cercanos al Gobierno, involucrados con el narcotráfico, entre ellos: el "narco-amauta" Valentín Mejillones, el "narco-alcalde"del municipio de Calamarca, Jasid Mamani; las hermanas Terán, el caso del secuestro de 944 kilos de cocaína boliviana en España, a bordo de un narcojet que develó los nexos de Bolivia con el Cártel de droga del Valle, el asesinato de 8 personas en Santa Cruz y 2 en Beni, a manos de sicarios que las acribillaron por ajustes de cuentas en un mes, entre el 25 de enero y el 26 de febrero de 2011, además de la aparición de modelos y policías investigados por legiti-mación de ganancias ilícitas.

Lamentó las declaraciones de Felipe Cáceres. “Dijo que la DEA estaba dolida y por eso detuvo a Sanabria, pero lo aprehendió porque llevaba 60 kilos de droga”.